Seis décadas y 60 reformas para la constitución ‘provisional’
Llamada a ser una norma transitoria para la Alemania occidental de postguerra, la denominada Ley Fundamental (Grundgesetz) si- gue vigente casi 70 años después de su promulgación, como Constitución de la República Federal Alemana. Por el camino, decenas de modificaciones, ampliaciones y unas cuantas reformas en profundidad que han permitido adaptar el texto a la realidad nacional de cada momento. Promulgada el 23 de mayo de 1949, no recibió el nombre de constitución, sino de Ley Fundamental, lo que trataba de remarcar la provisionalidad de un texto vigente en principio, únicamente, en los territorios bajo control aliado, que en aquellos días dieron origen a la República Federal Alemana. Sólo dos años más tarde tuvo lugar la primera modificación de la ley, enmendada seriamente de nuevo en 1956, cuando se aprobó el rearme y la creación de las fuerzas armadas alemanas. Ya en la década de los 90 tuvieron lugar una serie de reformas constitucionales de calado, principalmente relacionadas con la reunificación alemana y el proceso de integración en el seno de la Unión Europea.
Las dos últimas grandes reformas han sido las conocidas como reformas del federalismo. Aprobadas en el 2006 y 2009, se reorganizaron las competencias del Estado federal y los estados federados. En diciembre del 2014 tuvo lugar el último ejecutado hasta la fecha, el sexagésimo. Se trata de una acción política encaminada a promover la investigación y la mejora de la financiación de los centros de enseñanza superior. Aprobar un cambio constitucional en Alemania requiere de unos amplios consensos, tanto ideológicos como territoriales. Se necesita el voto favorable de dos tercios tanto del Bundestag, la cámara baja, como del Bundesrat, la cámara alta en la que se representan los länder o estados federados. La principal reforma del Estado federal, por ejemplo, fue materializada en el 2006 en el marco del primer gobierno de Merkel. Por otro lado, cabe apuntar que no todo es variable en la Constitución alemana. Los principios establecidos en los artículos 1 y 20 se consideran inalterables. Hacen referencia a la dignidad humana, los principios del Estado, como la democracia o el Estado de Bienestar.