La Vanguardia (1ª edición)

Flavia Pennetta

TENISTA

- CANDY RODÓ Nueva York. Servicio especial

Después de quince años en el circuito profesiona­l, Flavia Pennetta (33) consiguió adjudicars­e su primer Grand Slam, el Open de EE.UU., y al término de la final anunció que cuelga la raqueta. No hay mejor manera de despedirse.

Muy pocos conocían el secreto de Flavia Pennetta. Ni siguiera su mejor amiga en el circuito, con la que iba a disputar una histórica final de Grand Slam. Salió a jugar el partido más importante de su vida con ese enigma dentro. “Pasara lo que pasara, la decisión estaba tomada”, explicaría posteriorm­ente. “Ganar o perder no iba a cambiar nada”.

Y así, después de superar a Roberta Vinci, después de agradecer el apoyo de los espectador­es, de felicitar a su amiga por un gran torneo, y decirle a su equipo cuán importante había sido su ayuda para este logro, llegó el momento de hacer público su secreto. “Éste ha sido mi último partido en el Open”. Flavia puntualizó más tarde que jugaría hasta final de temporada.

A muchos se les hacía difícil comprender por qué ahora, cuando está en lo más alto de su carrera y jugando tan bien, es cuando decide irse. “Se me está haciendo duro competir –reconoció–. Cuando tienes que jugar 24 semanas al año, tienes que luchar en cada una de ellas. Siento que ya no tengo la voluntad de seguir haciéndolo”.

Hasta ese momento, sólo un pequeño grupo sabía sus intencione­s. “Sólo se lo dije a mi familia, a mi equipo técnico y a Fabio (Fognini)”, admitía Pennetta. Había tomado la decisión hacía un mes, en Toronto. “Ya había tenido un mal momento en Roland Garros. Tres días antes pensé en retirarme del torneo. A veces estamos con miedo de tomar la decisión porque no sabemos qué pasará después. Pero creo que será una buena vida”. Y una amplia sonrisa se dibujaba en sus labios.

Roberta Vinci, a quien le confesó su secreto justo antes de contárselo al mundo, sólo tuvo palabras de aliento para el futuro de su amiga. Eso sí, después de superar su sorpresa inicial. “Pero luego le dije ‘haces bien. Vete, vete, es una gran manera de hacerlo’”. Vinci y Flavia se conocen desde niñas. Se enfrentaro­n por primera vez a los nueve años y vivieron cuatro años y medio en el mismo apartament­o en Roma, cuando estaban trabajando con la Federación Italiana de tenis. Desde entonces han vivido muchas experienci­as compartida­s. Juntas ganaron el título de dobles júnior en Roland Garros en 1999. Y juntas han ganado la Copa Federación como parte del mismo equipo en cuatro ocasiones. Pocos saben tan bien como Roberta lo que se ha sacrificad­o Flavia durante estos 15 años de profesiona­l. “Pierdes tantas cosas cuando eres joven –se lamentaba Pennetta–. Pero con el triunfo de ahora, mi vida es perfecta”.

A sus 33 años, no se arrepiente de su decisión. “Es un contexto de carrera perfecto, un momento precioso. Si miro atrás, he estado dos veces entre las diez mejores del mundo, tengo un super 9, ahora un Grand Slam…”, comenta. “¿Qué imagen se llevará de este emotivo momento?”, le preguntan. Y responde sin dudar: “El abrazo con Roberta”.

 ??  ??
 ?? JEWEL SAMAD / AFP ?? Flavia Pennetta celebra su victoria en el Open de Estados Unidos
JEWEL SAMAD / AFP Flavia Pennetta celebra su victoria en el Open de Estados Unidos

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain