Un andén mucho más ancho descongestionará Provença
La estación de Ferrocarrils ganará espacio para los pasajeros en una compleja obra que durará casi dos años
El Diari Oficial de la Generalitat publica hoy el proyecto de remodelación de la estación de Provença de Ferrocarrils de la Generalitat de Catalunya (FGC), una obra que, entre otras cosas, ampliará la superficie del sobresaturado andén donde paran los trenes con destino a Sarrià y el Vallès. Esta obra, de muy compleja ejecución, ha de ser la solución definitiva pa- ra una estación que, en las horas punta, roza el colapso a pesar de las medidas adoptadas en los últimos tiempos para garantizar la seguridad de los pasajeros, la instalación de puertas en el andén de la vía 1 y la actuación de agentes de FGC que, con el apoyo de la megafonía, intentan redistribuir a los usuarios por todo el andén para evitar en la medida de lo posible las acumulaciones.
Básicamente, la intervención que se somete a información pública consistirá en una gran ampliación del andén de Sarrià, sólo en el tramo que presenta mayores niveles de saturación. En un día laborable, entre las 8 y las 9 de la mañana, pasan por este andén entre 4.000 y 4.500 personas.
Este ensanchamiento del andén afectará a 27 metros, en los que de los 2,95 metros actuales se pasará a una anchura útil de 7,97 metros. Esta ampliación se proyecta en la zona más próxima al vestíbulo de la calle Rosselló, que es el que tiene un mayor tráfico de personas. En suma, el andén incrementará en 97,8 m2 la superficie útil actual, hasta alcanzar casi los 200 m2. Asimismo, el proyecto prevé dos salidas de emergencia desde la cota del andén hasta la calle: una situada en el pozo existente en el chaflán Besòs/Mar de la confluencia de las calles Balmes con Rosselló y otra en la calle Rosselló. El objetivo es que, en caso de emergencia, toda la carga de ocupación del los andenes se evacue en menos de cuatro minutos y que en menos de seis todas las personas se encuentren en un lugar seguro.
El presupuesto de ejecución de la obra es de unos 9 millones de euros. Está prevista en cuatro fases, con una duración total de 23 meses, y la principal complejidad
Por el tramo afectado pasan en la hora punta, de 8 a 9 de la mañana, más de cuatro mil personas
radica en el hecho que la obra se realiza en un subsuelo sobre el que hay edificios de viviendas, lo que aconseja extremar la prudencia y las medidas de seguridad en la excavación. La previsión de inicio de esta obra, largamente esperada y que figura en el Plan de Infraestructuras de Catalunya, está fijada en septiembre del 2016 a fin de que el nuevo andén esté totalmente operativo en las navidades del 2018.
El proyecto del Departament de Territori i Sostenibilitat procura que las afectaciones de esta obra sean las menos posibles. Por lo que respecta al servicio de Ferrocarrils, en todo momento se garantiza el funcionamiento de los trenes, de los vestíbulos de las calles Rosselló y Provença y de la correspondencia con las líneas 3 y 5 del metro. Se garantiza, asimismo, el acceso permanente a las viviendas y comercios de la zona. Sí que habrá algunas afectaciones al paso de viandantes y al tráfico que, en las diferentes fases de la obra, obligará a cortar algunos carriles de circulación en las calzadas de las calles Balmes y Rosselló. Finalmente, la intervención sobre el arbolado será mínima: tan sólo habrá que retirar cinco ejemplares y cuatro de ellos serán trasplantados al finalizar la obra.