Ursula Haverbeck
ESCRITORA NEONAZI
A sus 87 años, la escritora alemana Ursula Haverbeck ha sido condenada a diez meses de cárcel por haber afirmado en una entrevista que el Holocausto había sido la mayor y más persistente mentira de la historia.
Su avanzada edad, sus cabellos blancos y su aspecto impecable la han convertido en la gran dama de los negacionistas y neonazis alemanes. Un tribunal de Hamburgo condenó esta semana a la autora octogenaria Ursula Haverbeck a diez meses de cárcel por incitación al odio, después de que la aludida afirmara en abril que el Holocausto es “la mayor y más persistente mentira de la historia”. Lo dijo en una entrevista en la cadena televisiva NDR con motivo del juicio a Oskar Gröning, miembro de las Waffen-SS apodado el contable de Auschwitz, que recibió una pena de cuatro años por complicidad en el asesinato de 300.000 judíos.
Según Ursula Haverbeck, de 87 años, el genocidio de los judíos a manos del régimen nazi no existió, y Auschwitz era “un campo de trabajo, no un campo de exterminio”. En la audiencia, se reafirmó en sus tesis, y calificó la legislación alemana sobre incitación al odio (en concreto, el párrafo 130) de “ley destinada a perpetuar una mentira”.
La gran dama de los negacionistas –expresión acuñada por el rotativo de centroizquierda Die Tageszeitung– había tenido ya condenas por afirmaciones similares, pero fueron multas o indemnizaciones; esta es la primera vez que la sentencia es de prisión. La autora de libros y otros escritos –que vive en Vlotho, localidad del land de Renania del NorteWestfalia– anunció que apelará.
Ursula Haverbeck, viuda del nazi Werner Georg Haverbeck, fallecido en 1999, fundó junto a él en esa ciudad el Collegium Humanum, un centro de enseñanza para adultos pronto reputado por su elevada concentración de negacionistas. Finalmente, el Ministerio del Interior lo prohibió en 2008, al igual que otra entidad de la que Haverbeck era vicepresidenta, la Sociedad para la Rehabilitación de los Perseguidos por Refutar el Holocausto (VRBHV, por sus siglas en alemán). Como oradora, también ha participado en actos del Partido Nacionaldemocrático de Alemania (NPD), formación de extrema derecha.
La anciana negacionista entró en la sala de juicio con el ramo de flores que le había entregado un correligionario también condenado por la justicia, Riegolf Hennig, de 71 años, mientras una treintena de simpatizantes de pelo cano llenaba la sala habilitada para el público, y muchos protestaban por haberse quedado fuera, según el relato del diario local Hamburger Morgenpost. A la fiscal, Haverbeck le dijo: “¿De dónde saca usted como jurista el derecho a afirmar que Auschwitz fue un campo de exterminio?” En ese campo y en su contiguo de Birkenau, en la Polonia ocupada, murieron entre 1940 y 1945 del orden de 1,1 millones de personas, la inmensa mayoría judíos. La cifra total de judíos asesinados se estima en unos seis millones.
A la interpelación de Haverbeck acabó replicando el juez, Björn Jönsson: “Es inútil discutir con gente que no acepta los hechos. Tampoco tengo por qué probar que la Tierra es redonda”. Por su parte, la fiscal vio en la acusada “obcecación fanática” y pidió diez meses de cárcel. “Es lamentable que una mujer que a su edad está aún tan ágil malgaste su energía en propagar un disparate tan espeluznante”, dijo.
En su página en internet, con el lema Por la verdad y la justicia, Ursula Haverbeck se declara “representante del revisionismo histórico” y “combatiente intrépida por la verdad”, y enarbola la cita de la entrevista a la NDR que le ha procurado la condena. Al juicio se presentó sin abogado defensor. El juez acabó diciéndole: “Con usted se echan a perder el lúpulo y la malta”, traducción literal de una expresión alemana que se usa para indicar que alguien no tiene remedio.
Haverbeck niega que Auschwitz fuera un campo de exterminio; según ella, “era un campo de trabajo”