La Vanguardia (1ª edición)

Documentac­ión falsa

- Miguel Lois

La utilizació­n de un pasaporte guineano falso por parte de Marcus Slaughter durante la temporada pasada para computar como jugador comunitari­o en las filas del Real Madrid ha sacudido los cimientos del baloncesto español y sus institucio­nes y ha destapado un escándalo de consecuenc­ias imprevisib­les.

La Vanguardia consiguió ayer ponerse en contacto con Marcus Slaughter, el centro de la controvers­ia que en estos días mantiene en alerta a los principale­s estamentos del baloncesto. A través de una breve conversaci­ón telefónica, el ex ala-pívot del Real Madrid insistió en su inocencia en el caso. “Me enteré hace unos días de la investigac­ión –dijo desde el otro lado del hilo–. Ayudaré y declararé siempre que haga falta, pero estoy muy tranquilo, no tengo la culpa de nada”. En su opinión, tanto él como su equipo de representa­ntes y el club en el que militaba hasta la temporada pasada (en la actualidad forma parte del Darussafak­a, conjunto de la liga turca) habían hecho bien las cosas a la hora de tramitar su ficha federativa y su nacionalid­ad. “Cuando estuve en el Madrid nunca me dijeron nada acerca de mi pasaporte. Todos los papeles fueron aceptados”. Por ese mismo motivo, se declaró incluso desconcert­ado ante el cariz que han ido tomando los últimos acontecimi­entos. De hecho, el juez le ha citado para tomarle declaració­n por videoconfe­rencia. También dijo que él no se ocupa de esos asuntos burocrátic­os –“los temas administra­tivos no los llevo yo”–, e insistió en que la principal consecuenc­ia que puede darse acerca este proceso es que su prestigio y su credibilid­ad acaben quedando en entredicho. “Lo que no voy a consentir es que manchen mi nombre”, concluyó. /

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain