Bélgica y Francia pactan más intercambio de datos antiterroristas
Bélgica y Francia acordaron ayer intensificar la cooperación para combatir la “amenaza común terrorista”, con un intercambio más rápido de información sobre terroristas potenciales y medidas contra la falsificación de documentos. También pidieron al res- to de países de la UE que aceleren la puesta en marcha de medidas en ese mismo ámbito.
Dos meses y medio después de los atentados islamistas de París en los que murieron 130 personas, el primer ministro belga, Charles Michel, y su homólogo francés, Manuel Valls, celebraron una minicumbre bilateral en Bruselas. Los atentados pusieron de relieve deficiencias en el intercambio de información de seguridad entre ambos países. Las relaciones se han tensado por las acusaciones francesas de que las fuerzas de seguridad belgas no se tomaron suficientemente en serio la vigilancia de yihadistas fichados, que pudieron preparar desde Bruselas sus ataques sobre la capital francesa.
Valls y Michel pidieron un “pacto europeo de seguridad, indispensable para la supervivencia de Schengen, la supervivencia del modelo europeo y la protección de los europeos”, declaró Valls al finalizar la reunión. Subrayó que la amenaza terrorista al- canza “un nivel sin precedentes”, y consideró que la UE debe demostrar que “está a la altura”.
En la declaración conjunta se enumeran algunas medidas que deben tomarse a nivel europeo, como el registro de pasajeros aéreos, que el Parlamento Europeo se dispone a aprobar, o un control “sistemático y obligatorio” de las fronteras exteriores, también para los ciudadanos europeos.
Michel advirtió sobre las nuevas formas de terrorismo cada vez más “disimuladas” y “profesionalizadas”, lo que exige que los países se adapten para ser capaces de anticiparse. Indicó por otra parte que las investigaciones realizadas por ambos países tras los atentados de París han dado lugar a “cooperaciones intensas, con equipos conjuntos”, y que el objetivo ahora es “sistematizar” esa cooperación.
Por su parte, Valls indicó que esas investigaciones “siguen su curso”, y que los dos países confían en que sirvan para “detener pronto a los terroristas fugados y para identificar” a todos los participantes en los ataques. El primer ministro francés destacó el “excelente espíritu de cooperación, a nivel judicial y policial” entre Francia y Bélgica y consideró que no se debe achacar a ninguno de los dos la responsabilidad de los fallos o deficiencias cometidos tras los ataques de París.