Jaque al rey Fahd
La viuda secreta del monarca saudí lo retrata como un adicto al juego y las drogas
Janan Harb prometió escribir sus memorias y que con ellas se rodará un filme sobre el rey Fahd bin Abdulaziz al Saud. Dicho y hecho. La llamada por la prensa británica “esposa secreta” del que fue monarca de Arabia Saudí es ahora una mujer de 68 años que ha cumplido su venganza.
La cinta, según la publicacion de internet Middle East Eye, se va a llamar La debilidad del rey Fahd y ha sido dirigida por el británico Malcom Walker. Se espera que salga a la luz a finales de febrero y describe al monarca como un ludópata aficionado al juego en los casinos del barrio de Mayfair, en Londres, consumidor de drogas habitual, derrochador y con unos valores morales que dejan mucho que desear.
Janan era hasta hace pocos años una desconocida. La prensa del Reino Unido la bautizó como “la esposa secreta” del Rey Fahd cuando llevó a los tribunales de justicia británicos su caso. Harb aseguró que antes de su muerte en el 2005, el rey Fahd prometió ayudarla económicamente para que nunca le faltara de nada, pero su hijo el príncipe Abdulaziz no quiso que se cumpliera la palabra de su padre. El caso se resolvió a favor de la mujer y la familia real saudí se vio obligada a pagar la suma de 12 millones de libras esterlinas (unos 15,8 millones de euros) más dos apartamentos de lujo en el exclusivo barrio londinense de Chelsea.
Su historia de amor comenzó cuando ella era una joven veinteañera palestina que huía de la Cisjordania ocupada por Israel. Él tenía 45 años y era el favorito de su hermano, el rey Faisal, para sucederle en el trono y no paró hasta poder conquistarla.
Harb se convirtió al Islam antes de casarse en marzo de 1968. Asegura que se sintió como prisionera entre las cuatro paredes de su mansión de Riad y que los hijos nunca llegaron porque, aunque se quedó embarazada en varias ocasiones, siempre la obligaron a abortar. El rey Fahd “no quería tener a unos pequeños Arafat rondando por el palacio”, explicó refiriéndose al que fue líder palestino Yasser Arafat.
Janan Harb asegura que si el rey Fahd estuviera vivo no estaría contento con el filme, pero se excusa explicando que “la verdad tiene que salir a la luz y el mundo entero tiene que saber cómo se vive exactamente dentro de esos palacios”.
Janan Harb ganó una demanda contra la familia real saudí por la que recibió más de 15 millones de euros
En la película se va a hablar también del actual rey saudí, Salman bin Abdulaziz al Saud. “No es buena gente”, declara Harb, a la vez que señala que cuando ella le conoció no tenía buena reputación y era muy agresivo. Además asegura que él fue el responsable de que se la obligara a dejar el país en 1970.
Harb explica que el actual rey Salman creía que ella era una amenaza porque aunque se convirtió al Islam era palestina de origen cristiano. Explica además que Fahd hizo un trato para que la dejaran marchar viva y que fuera deportada al Reino Unido. Ello no sirvió para callarla y ahora, con esta película, los secretos del anterior rey y los del actual estarán al descubierto.