Poesía para la vista
Faustí Llucià retrata fragmentos vegetales encontrados en las calles de Barcelona
La galería Miguel Marcos presenta una selección de poemas visuales, libros y carteles de Joan Brossa entre los que se encuentran algunos de los mejores logros del añorado poeta en estos tres campos.
En la selección de poemas visuales, libros y carteles de Joan Brossa que presenta la galería Miguel Marcos se encuentran algunos de los mejores logros del poeta barcelonés en estos tres campos. Mencionaré en primer lugar el libro Cartipàs, de 1973, en colaboración con Moisès Villèlia. El texto de Brossa es un ejemplo de poesía libre y moderna, que contrasta con el canon provinciano y rutinario, cutre o rancio, con la poesía que en los últimos decenios se suele promover y premiar en España y también en Catalunya, poesía que a menudo es premoderna, anticuada, previsible, obvia, innecesaria, sin vuelo ni profundidad.
Otro ejemplo de excelencia que se expone en Miguel Marcos es el poema tipográfico de 1988 llamado Poema visual. Consiste en sólo dos letras mayúsculas. Una A en la que aparece superpuesta la sombra de una B y una B en la que se superpone la sombra de una A. Brossa consigue aquí lo máximo con lo mínimo. Esta obra permite distintas interpretaciones no contradictorias. Yo la interpreto como un lúcido ejercicio de poesía y de filosofía, como una minimalista declaración de principios que cuestiona los ilusos y reductores planteamientos meramente racionalistas, la vana seguridad de los pensadores sistemáticos y controladores, que son mayoría apabullante en la historia de la filosofía. Con sólo dos letras –y sus sombras– Brossa supera y corrige el error de quienes sobrevaloran la lógica y las certezas porque ignoran que la identidad –como la realidad– es cambiante, azarosa, relativa y múltiple.
Mi otra obra favorita de esta muestra es el cartel de les Festes de tardor, de 1987, realizado para el ayuntamiento de Barcelona. Una obra maestra del género que merece figurar en cualquier historia del cartelismo. Representa una carta de la baraja española, el ocho de copas, pero el naipe ha sido vaciado, está en blanco. Las ocho copas están cayendo y parecen oscilar como hojas de otoño. Una de ellas ya se escapa del cartel. Se superponen además a la tipografía, sin llegarla a ocultar, lo cual crea un efecto de profundidad de campo con mínimos elementos. Y las copas son como notas o ritmos de color –amarillas por fuera, rojas por dentro y con la base azul– en un encuadre donde predomina el vacío blanco. Esta obra de Brossa funciona como cartel, pues comunica, incluso con su parte vacía, una idea certera, original, y la expresa con intensidad y eficacia gráfica. Pero lo mejor es que, además, funciona como poema visual, como expresión poética. Me recuerda a algunos collages de Guillem Cifré, que también sabía conciliar la comunicación inmediata y el tono popular con la sutileza y la concentración propias de la expresión poética. Imagino que la homofonía, en catalán, del vuit yel buit, pudo originar esa asociación de la cifra con la carta en blanco. Galería Miguel Marcos. Jonqueres, 10. Hasta el 13 de mayo. Faustí Llucià. Creo que Brossa habría sabido apreciar la serie de fotografías Botànica Urbana, que Faustí Llucià expone en Barcelona Visions. Llucià despliega en esta galería y librería especializada en fotografía un conjunto de imágenes
En esta selección de obras de Joan Brossa se encuentran algunos de los mejores logros del poeta barcelonés
de fragmentos vegetales encontrados en distintas calles. A primera vista y desde lejos parecen dibujos, acuarelas de una enciclopedia botánica, pero si prestamos atención vemos que son fotografías muy bien realizadas, iluminadas por delante y por detrás. Sus títulos se refieren a las calles donde tuvo lugar el hallazgo: Marina-Gran Vía, por ejemplo. Y podemos deducir que el sentido de su propuesta es contrario al enciclopedista. Llucià no busca el biotipo general, sino los rasgos individuales de cada vegetal, con sus distorsiones, roturas y particularidades. Estas fotografías son, pues, retratos biográficos, formas modificadas por el tiempo y el azar, que evocan biografías no sólo vegetales, sino también otras equivalentes en el reino animal y en la especie humana. Barcelona Visions. Banys Vells, 7. Hasta el 15 mayo.