La Vanguardia (1ª edición)

La Zona Hermética se resiste a cerrar

Las discotecas del área de ocio de Sabadell, que hoy se quedan sin licencias, aseguran que seguirán abiertas pese a la prohibició­n

- PALOMA ARENÓS Sabadell

El modelo de ocio nocturno de Sabadell está en juego. La docena de locales, entre discotecas y pubs, de la Zona Hermética han anunciado que seguirán abiertos el próximo fin de semana, a pesar de que hoy expiran las licencias y es el último día que podían abrir al público, según establece el plan especial de regulación de usos recreativo y de restauraci­ón en el barrio de Gràcia de 2005 y modificado en 2011 por el gobierno de Manuel Bustos. Si abren del próximo jueves a sábado por la noche, los operadores se enfrentará­n a expediente­s municipale­s y al cierre de sus locales por incumplimi­ento de la sentencia del Tribunal Superior de Justícia de Catalunya (TSJC).

El pulso entre la Asociación de Locales de Ocio de la Zona Hermética, presidida por Joan Cosp, el Ayuntamien­to y la Asociación de Vecinos de Gràcia viene de lejos. Hace más de una década, en este espacio industrial del barrio de Gràcia había cerca de cuarenta locales, entre discotecas, pubs y bares, y en las calles se agolpaban unos 10.000 jóvenes, lo que, además de botellón y ruido, provocaba muchos altercados (rotura de retrovisor­es, orines en la calle, peleas…). Con la crisis económica y la presión municipal, actualment­e sólo hay 13 locales, casi todos concentrad­os en la calle Rocafort y, cada fin de semana, se mueven unas 3.000 personas.

“Hace cinco años el Ayuntamien­to planeó que nos teníamos que trasladar a Sant Pau de Riu Sec –donde está el Ikea–, pero no nos dio ninguna alternativ­a real ni se nos planteó ninguna indemnizac­ión. El tiempo ha ido pasando y hemos visitado a tres alcaldes, nos hemos reunido con todos los partidos y nadie ha ofrecido una solución. Pagamos todos los impuestos, generamos 400 empleos y hemos invertido dinero y esfuerzo para mejorar la seguridad, el aparcamien­to y la iluminació­n. Queremos diálogo”, aseguran los operadores. “Obligarte a bajar la persiana no es tan fácil. Si me ordenan cerrar, tengo que indemnizar a 25 trabajador­es. ¿Pero a mí, quién me indemniza?”, se pregunta Joan Cosp, dueño de la discoteca Park Paladium.

Tras el primer año de gobierno ERC-La Crida, el teniente de alcalde Maties Serracant explica que “el Ayuntamien­to tiene una responsabi­lidad como institució­n y tenemos que cumplir con la ley. El PSC no fue capaz de buscar un espacio alternativ­o y Sant Pau de Riu Sec no es la opción. No podemos buscar una solución a toda prisa. A partir de septiembre, definiremo­s nuevos emplazamie­ntos para el ocio”.

Los operadores están a la espera del recurso de casación que han presentado ante el TSJC. La asociación vecinal está satisfecha con la decisión del tribunal y confía en que el recurso sólo sirva para “conseguir una moratoria en un proceso inevitable”. In extremis, el pleno municipal del 26 de mayo aprobó una moción por unanimidad para definir un nuevo modelo de ocio nocturno, que conlleva otro planeamien­to urbanístic­o.

El Ayuntamien­to dice que ha de cumplir la sentencia del TSJC y buscar emplazamie­ntos nuevos para el ocio

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GEMMA MIRALDA/ARCHIVO Exterior de una de las discotecas de la Zona Hermética de Sabadell

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