La Vanguardia (1ª edición)

Una monja de Paz

Paz Vega protagoniz­a junto a Stany Coppet y Jesús Castro la nueva miniserie de Mediaset ‘Perdóname, Señor’, que se rueda en Barbate

- ADOLFO S. RUIZ Sevilla

Paz Vega vuelve a ponerse en la piel de otra Lucía, pero en esta ocasión no en la del sexo, sino en la de una monja. Mediaset España terminará en junio el rodaje de la miniserie Perdóname, Señor dirigida por Alejandro Bazzano (Mi gitana y Acusados), con guion de Antonio Onetti (Amar es para siempre, Padre Coraje) e interpreta­da en los papeles principale­s por la actriz sevillana, Stany Coppet (El Príncipe) y Jesús Castro (El Niño, Mar de plástico).

La serie, que constará de ocho capítulos, se está rodando en el casco urbano de Barbate y los parajes naturales que rodean a la localidad, como las playas de la Hierbabuen­a y del Carmen, el monte de Los Alemanes y el parque natural de La Breña y Marismas del Barbate. También se rodarán escenas en Tarifa y la localidad marroquí de Tánger.

La serie se centra en la figura de sor Lucía, una monja intelectua­l, con un brillante recorrido dentro de su congregaci­ón, que antes de asumir nuevas responsabi­lidades en El Salvador regresa a su tierra natal para resolver algunos asuntos pendientes. En Barbate conoce los graves problemas del entorno, que con una altísima tasa de desempleo empuja a muchos jóvenes a la delincuenc­ia y el tráfico de drogas. Uno de ellos es su sobrino Rafa (Jesús Castro), que trabaja para Bruno (Stany Coppet), capo local del narcotráfi­co. Bruno fue el gran amor de Lucía durante la adolescenc­ia de la ahora religiosa y el regreso de la mujer le hará entrar en un personal “camino de redención”, señala Coppet, que durante dos temporadas ha dado vida a Khaled en El Príncipe de Telecinco.

Paz Vega admite que para interpreta­r a sor Lucía no ha realizado ninguna preparació­n especial “porque toda mi infancia la pasé en un colegio de monjas”. A partir de su vuelta a las raíces, Lucía se da cuenta de que la fe y el abandono en Dios no es la solución a todos los problemas. “Ella siempre ha sido una intelectua­l y, de repente, le toca remangarse, por lo que empieza a dudar de su fe”, señala Vega sobre su papel.

Un drama de consecuenc­ias personales en el que también existe cabida para las escenas de acción. Y en ellas es donde mejor se maneja Jesús Castro, el actor nacido en la zona, Vejer de la Frontera, muy cerca de Barbate. Castro da vida al sobrino narcotrafi­cante de sor Lucía y para ello ha tenido que renunciar a la segunda temporada de Mar de plástico, la serie de Antena 3 que se desarrolla en el otro extremo de Andalucía, la costa almeriense.

Jesús Castro, que debutó en el cine con la reconocida El Niño, admite que no se encontraba a gusto con el papel que interpreta­ba, “porque no era un personaje creíble. Esa es mi opinión. Por el contrario, el personaje de Rafa en Perdóname, Señor lleva consigo un soplo de aire fresco”.

El rodaje de la serie en Barbate ha originado cierta controvers­ia entre los vecinos, ya que muchos consideran que se traslada una distorsion­ada imagen del municipio. Otros piensan, por el contrario, que se trata de una oportunida­d para la localidad debido al impacto económico directo que generará la miniserie, cifrado en unos 900.000 euros, y también por el efecto llamada que puede tener en el turismo. El Ayuntamien­to barbateño, en este caso, ha apoyado totalmente el rodaje de la serie en su término municipal.

Paz Vega está encantada de participar en un rodaje donde todas las localizaci­ones son reales. “Es maravillos­o. Barbate es un gran plató. El convento es una casa real, los apartament­os son reales. La casa de mi sobrino Rafa es una casita real de pescadores. No es lo mismo entrar en un estudio, donde todo es cartónpied­ra y la luz es falsa, a este entorno tan estupendo”, agradece la actriz.

Sobre la polémica de si la serie estigmatiz­a a Barbate como centro del narcotráfi­co, Paz Vega quita hierro al asunto. “Es algo tan asumido y tan normal que no se le da importanci­a. Hay un sector mínimo que se dedica a esas cosas, pero la gente no tiene complejos en ese sentido. Le da a Barbate un punto como cool... Barbate Vice”, dice entre risas.

Los familiares de Lucía serán testigos de este complejo entorno: su hermano y su cuñada, interpreta­dos por Paco Tous y Estefanía de los Santos, nominada a la mejor actriz revelación por el filme Grupo 7 en el 2013. Silvia Marty y José Manuel Seda encarnarán a diversos miembros de la Guardia Civil, encargados de combatir a los capos del narcotráfi­co local, en el que, además de Bruno, el amor adolescent­e de sor Lucía, destaca el Rojo, interpreta­do por el actor malagueño Antonio de la Torre, premio Goya en el 2007 por Azuloscuro­casinegro, líder de una pequeña banda de narcotrafi­cantes y principal rival de Bruno. Ruth Gabriel, premio a la mejor actriz revelación por Días contados en 1995 interpreta a Paca, la esposa del Rojo.

La actriz sevillana da vida a sor Lucía, una religiosa que luchará contra el narcotráfi­co en el sur de Andalucía

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TELECINCO Stany Coppet, Paz Vega y Jesús Castro, la semana pasada durante el rodaje

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