Otegi planta cara a la Fiscalía y registra su candidatura
La Junta Electoral analizará si el abertzale puede aspirar a ser diputado
El independentismo de izquierdas no pasa por su mejor momento en Euskadi y Arnaldo Otegi es, ahora mismo, la figura que mejor cohesiona los partidos que forman la coalición EH Bildu. El debate sobre su inhabilitación lo ha situado bajo los focos mediáticos y los soberanistas no piensan dejar escapar el filón. En consecuencia, ayer a primera hora formalizaron sus candidaturas a las elecciones vascas con el nombre del exportavoz de Batasuna como número uno por Gipuzkoa, a pesar de los avisos de la Fiscalía de la Audiencia Nacional.
Con este paso empieza a desplegarse el guion legal que puede acabar con su exclusión de las listas. Las formaciones que se presentan a los comicios del 25 de septiembre tienen tiempo hasta el lunes para registrar las candidaturas de los tres territorios. Ayer lo hicieron también el PNV y el PP. Con este calendario, no será hasta el próximo martes cuando la Junta Electoral guipuzcoana analizará si efectivamente hay una sentencia firme de inhabilitación y el líder abertzale no puede aspirar a ser diputado. Si queda fuera, su defensa recurrirá. En cambio, si pasa el filtro serán el PP, Ciudadanos, UPyD y el ministerio público los que lo impugnarán. Covite, el colectivo de víctimas del País Vasco, reclamó ayer a la Audiencia Nacional que actúe de oficio para “cortar de raíz la ilegalidad” que, a su juicio, se está promoviendo.
En cualquier caso, Bildu mantendrá el pulso político y no nombrará a un aspirante a lehendakari alternativo. La número dos del dirigente independentista es Maddalen Iriarte, periodista de la televisión pública vasca. En Bizkaia, destaca la presencia de Jone Goirizelaia, abogada y amiga de Otegi como número tres, y de Laura Mintegi –que fue cabeza de lista hace cuatro años– cerrando la candidatura. El último puesto en Gipuzkoa es para Elena Beloki, que fue condenada como responsable de comunicación del aparato internacional
El líder del PSOE desautoriza a Batet en relación con las aspiraciones del político independentista
de ETA y salió de prisión hace dos semanas. Los populares vascos creen que la decisión de formalizar la candidatura sin cambios forma parte de una estrategia “victimista” de los independentistas. Fuentes de Bildu, en cambio, aseguran que es el Estado quien les está haciendo “la campaña”. El PNV, que renovará a la mitad de sus parlamentarios, teme que el asunto tape los debates de precampaña.
La polémica del desafío de Otegi salpicó ayer al PSOE. Pedro Sánchez fue seco y terminante en su desautorización implícita del relativo respaldo que la responsable de estudios y programas del PSOE y candidata del PSC en las generales, Meritxell Batet, había ofrecido horas antes al líder de Sortu. “La posición de mi partido es la siguiente: corresponde a la justicia decir si Otegi puede presentarse”, dijo Sánchez.
Y añadió que los socialistas no van a “hacer campaña” en torno a la pugna política y electoral del recién excarcelado dirigente independentista.
Batet había indicado que, en su opinión, Otegi puede presentarse a los comicios del 25 de septiembre en el País Vasco. Porque, “desde el punto de vista jurídico ha cumplido sus obligaciones y por lo tanto –razonó– tiene la facultad” de concurrir como candidato.