50 años de trekkiemanía
Star trek: Más allá Dirección: Justin Lin
Intérpretes: Chris Pine, Zachary Scott, Simon Pegg, Zoe Saldana
Producción: EE.UU., 2016. Duración: 120 minutos. Ciencia ficción.
Aunque se rodó un capítulo piloto en 1964, protagonizado por Jeffrey Hunter, no fue hasta el 8 de septiembre de 1966, en breve hará 50 años, que la NBC estrenó, ya con William Shatner y Leonard Nimoy como protagonistas, The man trap, el primer capítulo de La
conquista del espacio, título con el que aquí recibimos Star trek. Tiempos lejanos (Kubrick aún no había estrenado su odisea) y a la vez, según cómo se miren, próximos, ya que la serie concebida por el idealista Gene Roddenberry nunca ha dejado de estar presente en nuestras vidas. En 1979, en plena fiebre galáctica, Star trek saltó a la gran pantalla. Y en 1987 aterrizó el relevo, con el capitán Picard al mando de la nave Enterprise. Aparecieron ramificaciones entre 1993 y 1994, entre 1995 y 2001 y entre 2001 y 2005. Los largometrajes siguieron estrenándose en cine, diez en total hasta 2002.
Y en 2009 entró en juego el ínclito J. J. Abrams, que en Star trek y Star trek: En la oscuridad puso el reloj a cero (operación hoy habitual en sagas, a la que se llama reboot), recreó a la vieja guardia y su camarería con rostros juveniles y, ahora, sin abandonar las tareas de producción, cede la silla de director a Justin Lin, bregado en blockbusters al haber firmado cuatro entregas de Fast & furious. Tan bien atada dejó Abrams la serie que Star trek: Más allá, siendo un producto de menor categoría que los dos precedentes, preserva el hechizo que hará las delicias de todo trekkie. Es, fiel a la serialidad, un episodio más, un muy buen episodio más donde, como manda la tradición, hay jugosas dosis de humor (el prólogo, un chiste a costa del tamaño de unas criaturas monstruosas) y mucha acción: la Enterprise no tarda en quedar hecha añicos y sus tripulantes, obligados a refugiarse en un planeta ignoto que nos trae el sabor de los clásicos del género (Planeta prohibido, Terror en el espacio): amenazador, misterioso. Ese agradable sabor, fruto de un conocimiento profundo de la ciencia ficción más genuina, augura nuevos episodios. ¡Larga vidaala Enterprise!