El Port Olímpic necesita más policía, sostiene la defensora de Barcelona
La memoria anual y las actuaciones de la Síndica de Greuges de Barcelona, Maria Assumpció Vilà, permiten hacer una radiografía de la ciudad y de sus barrios, que visita con periodicidad. Uno de los últimos ha sido la Vila Olímpica. Una de las principales conclusiones de Vilà, que recorrió la zona el 29 de julio con representantes de la asociación de vecinos, es que hace falta más presencia de la Guardia Urbana.
Sólo así –se sostiene en el resumen de la visita, que se hizo público ayer– se pueden “garantizar los usos cívicos del espacio público”, sobre todo en las inmediaciones de los locales de ocio y los aledaños del Port Olímpic. Los vecinos que hicieron de cicerones para Maria Assumpció Vilà le explicaron problemas muy concretos, como los que ocasiona un supermercado abierto las 24 horas del día en la calle Marina o las vibraciones que registran algunas viviendas de la calle Moscú cuando entran o salen trenes de la estación de França.
Y de los más local a lo más global. Una ambiciosa reivindicación vecinal aspira a que las instalaciones de la cárcel de mujeres de Wad-Ras (calle Doctor Trueta, 76) sean en el futuro un mercado municipal, “ya que está rodeado de equipamientos, lo que facilitaría la vida de barrio y el comercio de proximidad”. Los botellones, los ruidos de las ambulancias y la presencia de personas sin techo –entendida no como un problema estético, sino de solidaridad por “las condiciones en que malviven estas personas”– fueron otros de los problemas que plantearon los vecinos. También la falta de un casal para la tercera edad o que la única salida de la estación de metro de Ciutadella no esté adaptada para personas con discapacidades. pero no todo son problemas. La Síndica elogia , por ejemplo, la recogida neumática de basuras y “la recuperación de espacios para servicios ciudadanos de calidad”.