Adiós a Europa.
Los líderes de la UE defienden mantener las sanciones a Rusia por Ucrania
Los líderes de los cinco grandes países de Europa, con Alemania a la cabeza, aprovecharon la minicumbre de despedida ayer en Berlín al presidente de Estados Unidos, Barack Obama, para enviar algunos mensajes al futuro presidente de ese país, Donald Trump, que tomará posesión en enero. Reunidos por la canciller alemana, Angela Merkel, y con España reincorporada a un grupo integrado también por Francia, Italia y el Reino Unido, los cinco europeos acordaron “unánimemente”, en presencia de Obama, mantener las sanciones económicas a Rusia por su actuación en el conflicto de Ucrania. Hay temor en Europa a que Trump, que durante su campaña electoral alabó como líder a Vladímir Putin, establezca con el presidente ruso una relación amistosa que obvie el conflicto ucraniano, y de ello advirtió ya el jueves en Berlín el propio Barack Obama.
Una nota oficial de la Casa Blanca utilizaba la palabra “unánimemente” sobre el caso de las sanciones refiriéndose a “los líderes”, mientras que Obama es citado siempre como “el presidente”. Así pues, la canciller alemana, el presidente de Francia (François Hollande), los primeros ministros de Italia (Matteo Renzi) y Reino Unido (Theresa May), y el presidente del Gobierno español (Mariano Rajoy) defendieron el mantenimiento de las sanciones “hasta que Rusia cumpla totalmente los compromisos de los acuerdos de Minsk”; declararon su inquietud por “la continuada ausencia de un alto el fuego duradero”; e insistieron en “la importancia de crear un entorno seguro” que permita en el futuro “unas elecciones locales libres y limpias en las regiones ocupadas de Donetsk y Luhansk”.
En una rueda de prensa conjunta ayer de Angela Merkel y Mariano Rajoy –que tuvieron también una reunión bilateral–, la canciller dijo que “las sanciones a Rusia son por Ucrania, y no se ha planteado extenderlas al papel que está desempeñando Rusia en Siria”. Rajoy dijo que los reunidos censuraron de nuevo “la invasión ilegal de Crimea”, que ven “con preocupación la crisis humanitaria por los bombardeos en Alepo”, y que siguen la situación en Irak, y la ofensiva para expulsar al Estado Islámico (EI) de Mosul.
En la cumbre del adiós como presidente, Obama se despidió como tal de sus aliados en Europa, esforzándose una vez más en convencerles de que la llegada de Donald Trump a la Casa Blanca no acarreará consecuencias catastróficas para la Alianza Atlántica ni para el libre comercio. Tras la reunión, Obama se dirigió al aeropuerto de Tegel –que tiene un sector militar–, y de allí el Air Force One despegó con destino a Lima, donde el presidente estadounidense participará en la cumbre del Foro de Cooperación Económica Asia Pacífico (APEC). Allí está previsto que tenga un encuentro informal con Putin, quien piensa ya con gran interés en las ventajas de su sucesor.
En Berlín, Angela Merkel tuvo también un breve intercambio con Theresa May. Pese a los reiterados informes sobre la improvisación con que el Gobierno británico prepara el Brexit, la primera ministra aseguró que están en ello, y que “será un proceso fluido, un proceso ordenado, hacia una solución que interesa tanto a Reino Unido como a nuestros socios europeos”. Su país presentará la solicitud para abandonar la UE invocando el artículo 50 de los tratados, antes de fin de marzo del 2017, insistió.
Fuentes cercanas al Ejecutivo alemán comentaron esta semana que este formato de encuentro multilateral con Estados Unidos puede cuajar en el futuro, dadas las circunstancias, pues si bien en Europa se asume con naturalidad el eje franco-alemán por razones históricas, el Brexit y la nueva complejidad que prometen tener las relaciones transatlánticas en la era Trump aconsejan que los líderes de los mayores países europeos estén juntos en los encuentros. El italiano Renzi llevaba meses diciéndolo, y la presencia de Rajoy como presidente tras diez meses en funciones se entiende también en el marco del liderazgo de Merkel en la Europa que viene. Pese a las tensiones de la UE con el Gobierno conservador nacionalista de Polonia, es ese otro país al que cabe tener en cuenta en futuras cumbres de este tipo.
Esta vez, los seis participantes analizaron asuntos cuya introducción se repartieron por parejas, y en este orden: Obama y Renzi abordaron la lucha contra el terrorismo del EI, Rajoy y May se encargaron de refugiados y migraciones, y Merkel y Hollande plantearon la tensión con Rusia por el caso ucraniano.
El presidente de EE.UU. mantendrá un encuentro informal con Putin en Lima, durante la cumbre de la APEC