La Vanguardia (1ª edición)

Más Piqué que nunca

El polifacéti­co defensa, artífice del acuerdo con Rakuten, quiere volver hoy

- ANTONI LÓPEZ TOVAR Barcelona

Su objetivo de futuro es llegar a la presidenci­a del FC Barcelona –y desde ayer cuenta con el respaldo explícito de Josep Guardiola–, pero mientras tanto Gerard Piqué mantiene una actividad frenética dentro y fuera de los terrenos de juego. Embajador, portavoz del club, capitán sin brazalete, empresario, benefactor o adalid de las nuevas tecnología­s, al defensa sólo le faltaba ser el artífice del acuerdo con Rakuten que garantiza a la entidad blaugrana unos ingresos de 220 millones de euros en las próximas cuatro temporadas. Gerard puso al servicio del club su amistad con Hiroshi Mikitani, el empresario japonés que le admira precisamen­te porque su perfil personal se distancia del común de los futbolista­s. A Piqué no le gusta entrenarse, tiene multiplici­dad de intereses fuera del fútbol, pero se arremanga cada día en la ciudad deportiva porque no es un tópico, es una realidad palmaria: uno juega como se entrena. “Ahora tengo muchas ganas –explicó a Jordi Basté en una entrevista–. No sé por qué, pero me han vuelto las ganas de jugar, mucho, mucho más que cuando tenía 21 años. No me preguntes por qué, vas encontrand­o retos y ahora tengo mucha motivación”.

Hoy se cumple un mes desde que, en la visita del Manchester City al Camp Nou, el central sufrió un esguince en el ligamento lateral externo del tobillo derecho. Desde entonces no ha vuelto a jugar, pero la lesión y su tratamient­o no han mermado su amplia agenda social. En la última semana Piqué ha viajado dos veces a Londres para asistir al Masters de tenis, donde coincidió con Mourinho, y el martes al partido de la selección española en Wembley. El miércoles acudió, junto a Shakira, a la cena con que los dirigentes del Barça y de Rakuten celebraron su alianza de patrocinio. Un convenio que, por una vez, ha suscitado la unanimidad en las facciones del barcelonis­mo. “Es un acuerdo a la altura del club, de lo que significa el Barça a nivel mundial”, juzgó ayer Luis Enrique, poco inclinado a opinar sobre cuestiones extrafutbo­lísticas.

Es hiperactiv­o, más Piqué que nunca. “Hay que gente que me pregunta por los mejores años de mi carrera. Y son ahora, estos dos últimos años siento que es el Gerard más completo de los últimos años”, explicó. La lesión le ha impedido participar en los codiciados desplazami­entos a Valencia, Sevilla y Manchester, pero Gerard está a punto para regresar a la competició­n y eso es una gran noticia para Luis Enrique. El central puede ser una de las grandes novedades del equipo en el partido contra el Málaga, junto a Paco Alcácer, cuya titularida­d como alternativ­a al sancionado Luis Suárez ha sido confirmada por el entrenador en otro gesto inusual. Es una gran oportunida­d para el nueve valenciano, valoró el técnico: “Su objeti-

vo no es sólo marcar goles, sino que el equipo gane. Seguro que hará un gran partido”.

Con tres victorias en los últimos cinco encuentros, el Málaga presenta una línea ascendente y Luis Enrique insiste en que el enfrentami­ento merece una “especial atención” por el hecho de producirse después del paréntesis de las seleccione­s. En este intervalo el Barça ha recuperado a los lesionados Piqué, Alba y Mathieu, pero ha perdido a Umtiti, lesionado en un entrenamie­nto de la selección de Francia. Es, junto a Iniesta, la única baja que presenta el Barcelona, aunque jugadores como Neymar –que ayer se entrenó por única vez desde que regresó de Brasil– no han podido preparar el partido de manera óptima. “Los jugadores sudamerica­nos ya están acostumbra­dos”, suavizó Luis Enrique.

Puede ser un día redondo para el Barça, con opciones de recuperar el liderato que sólo tuvo en la primera jornada. Ahora se sitúa a 2 puntos del Real Madrid, que visita el campo del Atlético (20.45 h). “Si ganamos, lo veré”, aseguró Luis Enrique respecto al derbi madrileño. “El resultado que me gustaría es que perdieran los dos”, agregó. De todas maneras, y aunque el calendario del Barça ha sido más complicado que el del equipo blanco, según el técnico un hipotético cambio de líder no permitirá extraer conclusion­es sobre el desenlace del campeonato.

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DAVID AIROB Gerard Piqué bromeando junto a los delanteros del Barcelona al comienzo del entrenamie­nto de ayer en la ciudad deportiva

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