Nueve empresarios admiten la financiación ilegal del PP
La confesión les evitará ir a prisión por el caso Gürtel
El caso Gürtel es una caja de sorpresas. Al menos, de sorpresas relativas, porque a estas alturas ya no puede extrañar que haya intentos de pacto con la Fiscalía para evitar el ingreso en prisión a cambio de admitir las propias culpas. Pero lo significativo es que esta vez no son uno, ni dos, ni tres, sino nueve los empresarios acusados de financiar irregularmente al PP los que han mostrado de una sola tacada su disponibilidad a confesar los hechos y asumir responsabilidades.
Se trata de empresarios imputados en las dos piezas separadas del caso Gürtel en las que se ha investigado la supuesta financiación ilegal del PP en Valencia. Lo que ahora admiten estos encausados es que financiaron irregularmente a los populares en dicha comunidad autónoma con ocasión de las elecciones municipales y autonómicas del 2007, y un año después, en las elecciones generales del 2008.
Esta nueva lista de interesados en la confesión ante la Fiscalía Anticorrupción se une a otra primera de tres empresarios que iniciaron el mismo camino meses atrás. Alejandro Pons, Enrique Ortiz y José Francisco Beviá lograron que se redujeran las peticiones de pena del fiscal a cambio de su disposición a explicar episodios de financiación irregular del PP.
La liturgia del arrepentimiento tiene, en todo caso, sus peculiaridades. No es tan fácil, en definitiva. La conformidad no sólo tiene que producirse con respecto al fiscal, sino también con respecto a las acusaciones particulares que puedan existir en la causa. En este caso, la que ha actuado en el proceso relativo a la rama valenciana de Gürtel es la ejercida por los socialistas de esta comunidad, el PSPV. Anticorrupción había solicitado para los nueve empresarios que ahora se avienen al pacto penas que oscilaban entre los cuatro y los seis años de prisión, por delitos relacionados con los procesos electorales mencionados y por falsedad en documento mercantil.
Los nueve empresarios interesados en el acuerdo para rebajar sus respectivas peticiones de pena firmarán hoy la correspondiente conformidad en la sede de Anticorrupción en Madrid. Son parte de un banquillo compuesto por 20 acusados cuyo juicio arrancará el próximo 13 de marzo. En este proceso también está acusado el cabecilla de la red Gürtel, Francisco Correa; su número dos, Pablo Crespo, y el cabeza visible de Orange Market, Álvaro Pérez, más conocido por el apodo del Bigotes. Ricardo Costa y Vicente Rambla, ex altos cargos del PP, también están acusados, y junto a ellos el ex consejero delegado de Repsol Ramón Blanco Balín, y Vicente Rambla, sobrino del expresidente de las Corts valencianas, Juan Cotino.
Paralelamente, la vista del caso Gürtel en la Audiencia Nacional prevé para el próximo lunes una jornada de especial interés. El tribunal decidió ayer que los acusados de ser partícipes a título lucrativo presten declaración en la vista. Entre quienes serán, por tanto, interrogados figuran la exministra Ana Mato (PP), exesposa del exalcalde de Pozuelo Jesús Sepúlveda. Y también tendrá que comparecer y declarar el representante legal del PP, porque este partido está asimismo imputado en esta causa como persona jurídica.
Entre las declaraciones de ayer cabe citar la de Teresa Gabarra, esposa del exconsejero de la Comunidad de Madrid Alberto López Viejo, acusado de enriquecerse con la trama. La declarante lo negó, y añadió: “A mí Gürtel no me regaló ni un albornoz”.
El lunes comparecen en el juicio la exministra Ana Mato y el PP como persona jurídica