La última promesa
El Barça incluye en el viaje a Milán al letón del filial Rodions Kurucs
Ante el alud de lesiones y el reguero de resultados desastrosos, savia nueva. Una mirada al filial. Un vistazo a qué hay por la casa que pueda valer la pena probar. Si Stefan Peno o Pol Figueras han aparecido esta campaña compleja por el primer equipo del Barcelona Lassa, ahora le ha llegado el turno al letón Rodions Kurucs (acaba de cumplir 19 años y mide 2,03 metros), al que el conjunto blaugrana ha inscrito para el partido de esta noche en Milán ante el Armani. En teoría y según todos los informes que se han ido manejando en la cantera barcelonista se trataría de una joya por pulir, de un jugador de posibilidades reales de dar el salto. Fue fichado en el verano del 2015, meses después de brillar en un torneo júnior que reunió a las mejores promesas en Madrid y en el que Kurucs fue el segundo jugador más destacado…tras Luka Doncic, actualmente el joven más talentoso del baloncesto europeo.
El Barcelona se fijó en él en aquella competición y lo incorporó poco después de perder al que había sido su mayor proyecto por pulir, el croata Mario Hezonja. Kurucs, que en su país ya había debutado en la élite con el VEF Riga, aprovechó sus primeros días en Barcelona para hacerse fotos con uno de sus ídolos, Juan Carlos Navarro, aunque no tuvo un inicio sencillo. Se puso a las órdenes de Alfred Julbe en el Barça B, pero pronto sufrió una grave lesión de rodilla que le tuvo siete meses apartado de las canchas. Sólo pudo participar en siete partidos con el filial, pero se recuperó a tiempo de ayudar al Barça júnior a ganar el campeonato de España, derrotando al Madrid en la final. Kurucs tuvo un papel relevante en el momento de sentenciar el encuentro ante los madridistas. De hecho, Julbe, a la hora de utilizar una palabra que defina a Kurucs, escoge “importante”.
Lástima para el letón que su progresión se viera frenada de nuevo el pasado septiembre por otra lesión de rodilla que le tuvo parado dos meses más. Una pena porque había participado en la pretemporada del primer equipo y Georgios Bartzokas se había llevado una buena impresión de él (por ejemplo anotó 12 puntos contra el Andorra). Kurucs, cuyo hermano menor fichó por el Baskonia, no se libró del mal fario que persigue al baloncesto barcelonista, pero por fin parece que está adquiriendo regularidad con el filial, que marcha último, donde ha disputado esta campaña 17 partidos y está rozando los 10 puntos de media en 20 minutos de juego.
Uno de sus compañeros en el B, el veterano exbase del Barça Víctor Sada, analiza al joven para La Vanguardia: “Es un jugador muy completo, tiene muy buen físico y puede ayudar en varios aspectos. En el B está jugando bastante y lo está haciendo bien. Tiene mucha proyección”. Para Sada “de los jóvenes de la cantera es el que ahora mismo veo con más opciones para el futuro”. Según el badalonés Kurucs, “tiene buena mano, las ideas muy claras de lo que quiere hacer y mucha capacidad de trabajo. Como a la mayoría de los jóvenes, le falta saber leer mejor el juego, pero eso se va cogiendo. Creo que puede ayudar en muchas cosas al primer equipo. Es un tres, pero también puede jugar de cuatro. Es un jugador comprometido”.
Bartzokas confirmó ayer su inclusión en partido de Euroliga: “Lleva entrenando unos 10 días con el equipo y ya lo hizo antes de lesionarse. Creo que podrá ayudarnos en Milán”. A ver si tiene la oportunidad, y la aprovecha.
El Barça se fijó en Kurucs en un torneo júnior en el que fue el segundo jugador más destacado tras Doncic “De los jóvenes de la cantera es el que ahora mismo veo con más opciones para el futuro”