La CUP se queda sola
El escrache a la sede del PP ha sido condenado por todos los partidos políticos.
“En los Països Catalans, los jóvenes segamos de raíz”, dice uno de los lemas de Arran, la organización juvenil independentista afín a la CUP. Tan de raíz, que desde el Govern y el Parlament condenaron ayer sin matices el escrache a la sede en Barcelona del PP. Todos los grupos se sumaron a una declaración conjunta de reprobación de los hechos, que además fueron denunciados por la formación que preside Xavier Garcia Albiol ante los Mossos d’Esquadra la tarde del lunes.
En el texto de la denuncia, el PP subraya que ante su sede se concentraron los miembros de Arran sin comunicarlo previamente, que impedían la entrada y salida del personal, y que se pegaron carteles y adhesivos propios de la organización independentista. Además, constatan la presencia de la diputada de la CUP Anna Gabriel y del exdiputado David Fernàndez, y denuncian que ninguno de los concentrados se identificó, pese a los requerimientos de los agentes policiales. Albiol fue más allá y aseguró en declaraciones en TVE que los Mossos no identificaron a los participantes en la ocupación por “órdenes políticas”.
En todo caso, el Govern y todos los grupos parlamentarios, excepto la CUP, volvieron ayer a condenar el escrache. Así, Neus Munté, portavoz del Ejecutivo catalán, afirmó que una acción como aquella no contribuye a ampliar la base independentista. JxSí tampoco ahorró críticas y condenó la ocupación “sin ningún tipo de matiz”. Su portavoz, Roger Torrent, aseveró que el proceso soberanista catalán “es y será pacífico, democrático y cívico, o no será”.
Cs, el PSC y Sí que es Pot lamentaron también la ocupación por las juventudes independentistas. De hecho, la formación naranja pidió al Govern que dejara de contar con la CUP, mientras que los socialistas celebraron que Carles Puigdemont condenara la acción. Todos los grupos parlamentarios, excepto los cuperos, firmaron una declaración propuesta por los populares en que el Parlament rechaza “firmemente” el escrache y la “intimidación” de Arran.
La CUP no sólo justificó la acción, porque “no hubo violencia” y, por tanto, “no hay motivo para querellas”. Anna Gabriel, diputada anticapitalista, añadió que las “amenazas” del PP no les preocupan. “Lo que nos preocupa es que el PDECat, ERC y CSQP asuman el marco mental del PP”. En los pasillos del Parlament, la diputada se enfrentó ayer a gritos con el portavoz de Catalunya Sí que es Pot, Joan Coscubiela, a quien calificó de “facha” por haber firmado la declaración.