El riesgo de la subida de tipos
El FMI advierte de la vulnerabilidad de la economía, altamente endeudada
En una economía que arrastra gigantescos volúmenes de deuda, cualquier buena noticia tiene una cara oscura. Tras anunciar una expansión económica y revisar al alza sus previsiones para el crecimiento mundial, el FMI destacó ayer los principales peligros en un mundo que vuelve a crecer.
En los últimos cinco años, los grandes bancos centrales han llevado a cabo una prodigiosa expansión monetaria, sin precedentes, en la que los tipos de interés en EE.UU., Europa y Japón se han situado en cero o incluso en niveles negativos. Se ha esquivado el peligro de la deflación. Pero ahora se empieza a cruzar la tierra incógnita de un nuevo ciclo alcista de tipos de interés. Y esto provoca zozobra en las sedes de las grandes instituciones multilaterales en el centro de Washington.
La inquietud ya existía antes de la llegada de Donald Trump a la Casa Blanca. Pero las propuestas del nuevo presidente de llevar a cabo una fuerte expansión fiscal, centrada en recortes del impuesto de sociedades y una expansión del gasto en infraestructura y defensa, eleva el peligro, dice el FMI. Las medidas de Trump crean un riesgo de “agravar los desequilibrios fiscales en EE.UU. y esto acelerará el ritmo de subidas de tipos”, dijo Tobías Adrián, el máximo responsable del análisis financiero del Fondo. Unos tipos altos auguran unos riesgos que acechan a las grandes áreas de la economía mundial, desde las endeudadas corporaciones estadounidenses y los grandes mercados emergentes hasta una banca debilitada en la zona euro, pasando por el alto endeudamiento de China.
Hasta la fecha, el FMI ha venido advirtiendo sobre la vulnerabilidad de las empresas en las economías emergentes. Ahora, por primera vez, destacan el riesgo en los billones de deuda de las empresas en Estados Unidos. Según el análisis del informe sobre estabilidad financiera, la mitad de la inversión que se realiza en EE.UU. corresponde a empresas de energía, servicios públicos y del sector inmobiliario, que ya están fuertemente apalancadas. Si la Administración Trump intenta incentivar la inversión mediante recortes de impuestos, el resultado puede ser explosivo.
“Una expansión de la inversión de estas empresas, incluso con ayudas tributarias, podría elevar sus niveles de endeudamiento, que ya son altos”, advierte el informe. Y sigue: “Un aumento rápido de los tipos de interés –como consecuencia de los desequilibrios fiscales– dañaría la capacidad de las empresas de pagar los intereses sobre su deuda al igual que ocurrió en la crisis (del 2008)”. Estas empresas vulnerables tienen activos que ascienden a una cifra astronómica de cuatro billones de dólares. El FMI recuerda
que las empresas estadounidenses han añadido 7,8 billones de dólares (equivalente a siete años del PIB español) desde el 2010.
Respecto a las economías emergentes, el repunte económico tras el colapso de los precios de materias primas y energía, la expansión creará otra vez más demanda de petróleo ruso, cobre chileno o soja brasileña. “Por el momento estamos en este buen camino”, dice el FMI. Pero conforme la Fed sube sus tipos de interés, crece la posibilidad de una salida de capitales desde Asia o Latinoamérica hacia las mayores rentabilidades del mercado de bonos estadounidense. Al mismo tiempo, las empresas en las economías emergentes que se han endeudado en dólares se verían perjudicas por la apreciación de la divisa. El FMI calcula que la deuda vulnerable rebasa el medio billón de dólares.
Por su parte, China se encuentra en una situación que recuerda al proverbial perro del hortelano... Si no crece, es mala noticia. Si crece, es aún peor. El FMI ha revisado al alza sus previsiones de crecimiento hasta el 6,6% en el 2017, lo cual ayudará a países exportadoras de materias primas, por ejemplo en Latinoamérica. Pero el crecimiento chino ya se basa en niveles insostenibles de deuda. Los activos bancarios equivalen a tres años del PIB, casi 30 billones de dólares, el crédito se ha duplicado en diez años, gran parte de ello para financiar pronto inmobiliarios e infraestructura, lo cual recuerda en alguna medida a España antes del gran pinchazo del 2010... “La tasa rápida de crecimiento del crédito requiere medidas urgentes”, dijo Matthew Jones, integrante del equipo de análisis financiero.
En el ámbito europeo, a pesar de la recapitalización de la banca, los créditos morosos en la zona euro equivalen ya a más de un billón de dolares. Los bancos más vulnerables y menos rentables equivalen a nada menos que 8,5 billones de dólares (ocho veces el PIB español). Los bancos nacionales –los que tiene más del 70% de sus activos en su mercado nacional– son mucho más vulnerables que los grandes bancos globales, según el FMI. Los países cuyos bancos nacionales son más vulnerables son Italia, Portugal, Alemana, España y el Reino Unido. Los países con más créditos morosos son Irlanda, Portugal, Italia (todos tienen más del 12% de morosos) y luego España, con el 5,7%.
Las medidas de la Casa Blanca podrían agravar los desequilibrios fiscales Los créditos morosos en la zona euro equivalen ya a más de un billón de dolares