EE.UU. ve “inquietante” el nuevo misil lanzado por Corea del Norte
Corea del Norte mantiene su desafío a la comunidad internacional y persiste en su política de perfeccionar su arsenal para atacar los territorios de Japón y EE.UU. Ayer lanzó otro misil de alcance medio, a modo de prueba, que cayó en las aguas del mar de Japón, tras recorrer unos 500 kilómetros. Un ensayo que el secretario de Estado de EE.UU. Rex Tillerson, calificó de inquietante, dada la asiduidad con que se producen estos lanzamientos.
Las autoridades militares de Corea del Sur anunciaron ayer que habían detectado un nuevo disparo de un misil por parte del régimen de Kim Jong Un. Según el Estado Mayor surcoreano, el proyectil fue lanzado a las cinco de la tarde, hora local, desde un punto cercano a Pukchang, en la provincia de Pyeongan del Sur, y recorrió una distancia de unos 500 kilómetros antes de caer en el mar de Japón, tras haber alcanzado un altura de 560 kilómetros.
En su comunicado, los militares surcoreanos señalaron que el misil disparado por Pyongyang presentaba las características de un Pukguksong-2. Un proyectil de alcance medio, disparado por primera vez en febrero pasado, que los expertos consideran que es capaz de alcanzar el territorio japonés. Un cohete, por otra parte, con un radio de acción inferior al que tendría el modelo Hwasong-12, que fue lanzado la semana anterior y que podría alcanzar la base estadounidense de Guam.
Este lanzamiento, el octavo en lo que va de año, encontró la rápida condena de los gobiernos de Japón, Corea del Sur y EE.UU., que expresaron su voluntad de castigar estas provocaciones con nuevas y más duras sanciones.
El secretario de Estado estadounidense, Rex Tillerson, calificó el lanzamiento de “decepcionante” e “inquietante”, dada la frecuencia con que el ejército norcoreano realiza últimamente las pruebas de sus misiles. Y en declaraciones a la cadena Fox instó a Pyongyang a poner fin a sus ensayos, ya que en caso contrario “el régimen de Corea del Norte se verá sometido a una creciente presión económica y diplomática”, dijo el jefe de la diplomacia estadounidense.
Por su parte, los expertos surcoreanos interpretaron el lanzamiento de este proyectil como un rechazo a la propuesta de EE.UU. de entablar un diálogo a cambio de detener sus programas de desarrollo nuclear y de misiles, así como una prueba para el nuevo presidente surcoreano, Moon Jae In, que apuesta por un acercamiento a Pyongyang.