El libro que he enviado a Trump
Desde Ginebra me llega un tuit de @Twitplomacy en inglés que recomienda la descarga del manual de los gobiernos en Twitter, “una excelente recopilación de consejos y líneas maestras preparado por el Gobierno catalán”. Twittplomacy tuitea sobre el uso que gobiernos y organizaciones internacionales hacen de los medios sociales.
La web clasifica los 50 líderes mundiales más populares en Twitter 2016 según el número de retuits (RT) por tuit. El podio lo ocupan @POTUS (Obama) con 14.000 RT por tuit; @KingSalman, rey de Arabia Saudí, con 12.000 y @realDonaldTrump con 8.000. A continuación está el @Pontifex Francisco con 7.000 RT por tuit y en unos meritorios 33.º y 50.º puestos @marianorajoy con 282 y la @CasaReal con 136 respectivamente.
Pero si algo va bien para aumentar la influencia en Twitter es presentarse a las elecciones estadounidenses y ganarlas. De los cinco millones de seguidores de Donald Trump a principios del 2016 ha pasado a los 30 millones actuales, y de los 8.000 RT por tuit a más de 70.000. Que @realDonaldTrump es uno de los usuarios más influyentes de Twitter lo demuestra que con un solo tuit puede hacer subir o bajar las acciones de una empresa o el valor de del dólar estadounidense.
El comportamiento predecible de los mercados basado en la impredecibilidad de los tuits del presidente de EE.UU. ha animado a programadores y empresas de inversión a crear sistemas automatizados de trading -bots- para especular en bolsa. Entre los seguidores de Trump hay una legión de bots que leen cada tuit, determinan si habla mal de una empresa, miran la cotización, venden los títulos antes de caer –todo en nanosegundos— y los recompran cuando el valor ha caído. Cuando en enero Trump criticó Delta Air Lines en Twitter uno de los bots más conocidos, el Trump and Dump, obtuvo una rentabilidad del 4,47%. El bot da sus ganancias a la Asociación Americana para la Prevención de la crueldad en los Animales; cada vez que Trump tuitea contra una empresa Trump and Dump salva un cachorro.
Otro presidente que sabe de la potencia comunicativa de Twitter es el MHP @KRLS Puigdemont. En la presentación del manual de los gobiernos en Twitter afirmaba que gracias a la tecnología, la potencia comunicativa de un pequeño gobierno es igual que la de uno grande y que lo que importa es la calidad de lo que se comunica. El manual (descargable en Gencat.cat) aporta técnicas e ideas a gobiernos y administraciones para actuar de manera coherente y efectiva en la red social.
El libro muestra casos emblemáticos de la presencia de la Generalitat en Twitter que ilustran cómo las nuevas vías de comunicación fomentan la conversación pública contribuyendo a mejorar la relación entre Administración y sociedad civil. Recomiendo el manual a tuiteros empedernidos y a internautas ajenos a la red. Las lecciones que contiene son aplicables a cualquier ámbito de la comunicación, en especial las secciones “Cómo hablar”, “Cómo escuchar” y “Normas de participación”. De momento ya le he enviado la versión en inglés al @realDonaldTrump.
A muchas empresas les iría mejor si el líder de EE.UU. aplicara el manual en Twitter del Gobierno catalán