Necesidades fisiológicas
El líder pierde 2 minutos por una urgencia intestinal y la general del Giro se estrecha
El líder del Giro, Tom Dumoulin, pierde dos minutos a causa de problemas intestinales al encarar la subida a la última dificultad de la etapa, el Umbrailpass, que conecta Suiza con Italia por la carretera más elevada de los Alpes suizos, asfaltada totalmente desde el 2015 y lógicamente nunca incluida en el recorrido.
Increíble cambio de escenario en el Giro. Una etapa de 222 kilómetros con el Mortirolo, el Stelvio y el Umbrailpass, con dos ascensiones más allá de los 2.500 metros, con terreno sobrado para endurecer la carrera y sacar provecho, pasará a la historia de este deporte rico en golpes de teatro por los problemas intestinales del líder. Cuando se encaraba la subida a la última dificultad del día, este Umbrailpass que conecta Suiza con Italia por la carretera más elevada de los Alpes suizos, asfaltada totalmente desde el 2015 y lógicamente nunca incluida en el recorrido de un Giro, cuando todo el mundo sabía que después del desgaste del Mortirolo y el Stelvio era el momento de la gran batalla..., la sorpresa que nadie podía prever. El líder Dumoulin pone pie en el suelo en el lado derecho de la calzada y empieza a sacarse la ropa. No podía más, y tenía que responder a una urgencia intestinal inmediata. Una imagen que no se puede decir que sea nunca vista en el ciclismo, pero que no suele aparecer entre los líderes cuando se juegan la victoria. Dumoulin perdió en torno a un minuto en esta operación fisiológica y abrió todas las incógnitas. Se trataba de una molestia repentina y pasajera...¿o era una indicación de problemas más importantes que podían anularlo como aspirante a la victoria?
Lo cierto es que los rivales del maglia rosa, después de unos momentos de incertidumbre, de estudiar si hacía falta esperar a Dumoulin o no, y después de comprobar que la cosa iba para largo, decidieron continuar con el ritmo alto de la etapa. Y Dumoulin, más o menos recuperado, hizo a solas –el equipo Sunweb poco trabajo puede hacer– el resto del recorrido.
Por la cima del Umbrailpass el primero fue Mikel Landa, protagonista del ataque más sólido de la jornada. A unos diez segundos coronaron Nibali y Quintana y a poco más de un minuto el resto de jefes de filas, los Pinot, Mollema, Zakarin, Pozzovivo... Dumoulin, que hay que decir que se defendió con bastante solvencia, perdía aquí unos 2m20s.
Después de un descenso marca de la casa de Nibali, la etapa se la jugaron entre él y Landa. El tiburón de Mesina fue más listo en la última curva y se apuntó la primera victoria italiana del Giro del Centenario. Quintana, tercero (habría sido una locura que intentara mantenerse a rueda de Nibali en la bajada), entró a una docena de segundos. Dumoulin, visiblemente molesto, llegó a 2m18s del vencedor.
“Me siento muy desilusionado”, se expresó Dumoulin. Pero era evidente que el todavía líder se mordía la lengua. “No ha sido ningún problema de piernas, he perdido tiempo por culpa mía. ¿Qué tenía que hacer el grupo? No lo sé. ¿Si esperaba otra reacción por su
Cuando llegaba el momento clave de la etapa, Dumoulin tuvo que detenerse casi un minuto
parte? No, yo no esperaba nada”.
La renta de Dumoulin antes de la primera de cinco etapas consecutivas de montaña casi se ha fundido. De los 2m41s sobre Quintana sólo conserva 31 segundos. Nibali, que era cuarto de la general a 3m40s, es ahora tercero a 1m12s. Todas las diferencias de los primeros clasificados se han acortado considerablemente y se abre un Giro más incierto. “El líder ha cedido, sea por unas razones o por otras”, comentó Quintana. “Ha sido un día de ritmo alto, muy rápido siempre. Por pedir me habría gustado sacarle 5 minutos, pero el resultado final es el que es. Querer una cosa y poder conseguirla no es lo mismo”, añadió el colombiano.
Dumoulin aparte, el más decepcionado en la meta era Mikel Landa. Se ha apoderado del liderato de la montaña, pero se le escurrió la victoria por milímetros. ¡“Qué le vamos a hacer! El ciclismo es así. A veces se gana...y a veces recibes una lección”. Y el Giro, más vivo que nunca.
Nibali, que superó a Landa en la última curva, y Quintana, tercero a 12s, recortan diferencias