Los sindicatos quieren que los salarios turísticos reflejen la pujanza del sector
Los empleados de hostelería piden alzas del 3% y la eliminación del modelo ‘kellys’
Los sindicatos reclamaron ayer a la patronal de la hostelería de Catalunya que el aumento de la rentabilidad de los hoteles (alrededor de un 10% anual) se perciba en los salarios de los trabajadores. Por eso han pedido en el marco de la negociación del convenio colectivo que el sueldo se incremente en más de un 3% anual durante los próximos tres años. La patronal -que ayer se negó a hacer declaraciones– sólo acepta una subida del 1,5% anual.
En lo que tampoco no hay acuerdo es en la regulación de las empresas multiservicios a través de las cuales los hoteles pagan sueldos de hasta 500 euros menos mensuales de lo que fija el convenio sectorial a trabajadoras como las camareras de piso, conocidas también como kellys. Fuentes de UGT y CC.OO. indicaron que la patronal se opone a regularlo pese a que los convenios de Cantabria, Baleares y Tenerife ya prohíben expresamente ese mecanismo y obligan a que todos los trabajadores –independientemente de la empresa para la que estén trabajando– cobren lo que marca el convenio.
El debate en el sector turístico sobre el reparto de los beneficios entre empresarios y trabajadores se produce en un momento en el que algunos economistas como los del BBVA Research piden fidelizar a los turistas que se han conseguido captar como consecuencia de que los destinos alternativos del entorno han sido abandonados por los visitantes ante el miedo a atentados. La discusión se produce también en medio del debate abierto en ciudades como Barcelona sobre el modelo turístico.
CC.OO. señala que uno de los principales indicadores de rentabilidad es el RevPar (ingresos medios por habitación disponible) que el año pasado creció un 9,1% y en los seis primeros meses del 2017 lo ha hecho en un 11,6%. Esteban Sanabria, de CC.OO., defiende que esa mejora evidente en el sector debe trasladarse a los salarios. Jesús Lodeiro, de UGT, asegura que “la patronal quiere seguir ganando más” y no repartirlo con los trabajadores.
La negociación por la parte de las empresas la lleva a cabo la Confederación Empresarial de Hostelería, Restauración y Apartamentos Turísticos de Catalunya (ConfeCat) que preside Juan Molas. Del convenio dependen unas 280.000 personas. Ladeiro asegura que según cálculos de UGT alrededor de un 20% de esos trabajadores están contratados por empresas multiservicios. El caso más extremo de esa situación es el de las empleadas conocidas como kellys. Son las camareras de piso, que se encargan de la limpieza de las habitaciones. Aunque están en el último escalón en la estructura de los hoteles desde el punto de vista salarial su papel es crucial para el funcionamiento del
La Confecat que preside Juan Molas se niega a eliminar los salarios bajos de las camareras de piso
establecimiento. UGT calcula que algunas empresas multiservicios pagan 700 euros brutos a la camareras de piso mientras que el convenio de Catalunya fija la retribución para esa actividad en 1.200 euros.
Esas empresas multiservicios pueden operar después de que la reforma laboral del PP del 2012 estableciera que prevalecía el convenio de empresas aunque fuera de menor importe por encima del sectorial. Lodeiro explica que en los tribunales han conseguido revertir hasta 45 convenios de empresas sectoriales con sueldos de miseria. Uno de los últimos casos se dio en los hoteles de Port Aventura.