23.000 policías y gendarmes, más los cuerpos de élite antiterrorista, movilizados
La movilización de 23.000 policías y gendarmes durante las tres semanas largas del Tour y el reforzamiento de los equipos especializados en la prevención de atentados son la demostración más palpable de la preocupación por la seguridad. No sólo de los organizadores de la carrera, sino también del mismo Ministerio del Interior francés, consciente de la vulnerabilidad de un acontecimiento deportivo a cielo abierto y con tantísimos kilómetros de exposición pública. “Por segundo año el Tour contará con agentes del GIGN” (la unidad de la gendarmería especializada en terrorismo), explica Christian Prudhomme, el director del Tour. Una de las novedades del 2017 es la intervención de catorce gendarmes con perros especialistas en la detección de explosivos, que entrarán en acción fundamentalmente en los podios de salida y de llegada de las etapas.
El dispositivo de alta seguridad del Tour tiene una fecha de creación muy clara: el día siguiente del atentado de Niza, el 14 de julio del año pasado, cuando la carrera francesa se encontraba en pleno desarrollo y entró directamente en la relación de acontecimientos populares hipotéticamente en el punto de mira del terrorismo.
“Nosotros lo que tenemos que hacer –explica Prudhomme– es seguir escrupulosamente las indicaciones de Interior. Pero sin olvidar que nuestro primer riesgo es la ruta del Tour, tener unos 12 millones de espectadores a pie de carretera, con vehículos que pasan, con la caravana publicitaria y otros potenciales peligros. Que el entusiasmo no elimine la prudencia”.
Los controles para acceder a las zonas internas de la carrera son bien visibles. Cualquier objeto de uso habitual (una bolsa, una mochila, una funda de portátil...) es revisado e identificado con una marca visible el primer día. Y aun así será revisado diariamente su contenido cada vez que se introduzca en alguna de estas zonas de especial vigilancia. Entre los numerosos empleados uniformados del Tour que se ocupan de estas tareas hay también policías que tratan de pasar inadvertidos.