Colau evita pronunciarse sobre la consulta del pacto
BComú inicia hoy la consulta a sus 10.000 simpatizantes sobre la conveniencia de mantener el pacto de gobierno con Collboni
Alrededor de 10.000 simpatizantes de BComú serán hoy invitados a pronunciarse sobre la conveniencia de mantener o no su alianza con los concejales del PSC al frente del Ayuntamiento de Barcelona. La formación quiere que los militantes sean los primeros en conocer la pregunta que se les formulará al respecto. Y la alcaldesa Ada Colau parece muy decidida a no influir de ningún modo en los resultados de esta convocatoria. Ello está exasperando a los socialistas. La líder de los comunes evita desde hace semanas pronunciarse sobre esta cuestión tan trascendental. Y hoy por hoy hasta la celebración del Mobile World Congress está en entredicho. La inquietud que genera la inestabilidad política se está expandiendo. La consulta entre las bases de los comunes, que se realizará a través de internet, se mantendrá abierta hasta última hora del sábado. Los resultados se conocerán el domingo por la tarde. Se trata, según subrayan los comunes, de un ejercicio “radicalmente democrático”.
El lunes el socialista Jaume Collboni, un tanto harto de desplantes, muy cansado de la pinza que PDECat y ERC están aplicando sobre el pacto de gobierno, pidió a Colau que se pronunciara, que dijera lo que realmente piensa sobre su pacto, la consulta y qué alianzas está dispuesta a sellar si deja atrás al PSC. Pero la alcaldesa prefirió mantener su silencio. Collboni participó anoche en el consejo de federación del PSC de Barcelona, en el encuentro de los representantes de las secciones de los barrios. El debate mostró el malestar que la actitud de la alcaldesa está despertando entre las bases socialistas. A pesar de ello los militantes del PSC continúan apostando por mantener el gobierno municipal.
Hace pocos días Colau y Collboni coincidieron en un encuentro de comerciantes, pero la alcaldesa se retiró antes porque estaba resfriada. Al parecer no intercambiaron muchas frases. Quizás de esta manera, surfeando, tratando de no mojarse, de salpicarse lo menos posible, el hipotético rechazo de las bases de los comunes a prolongar el acuerdo con los socialistas le resultaría mucho más fácil de encajar. A Colau y a sus concejales les cuesta mucho reconocer que la entrada de los socialistas en el gobierno municipal les fue tremendamente útil a la hora de aligerar sus sobrecargadas agendas y agilizar sus políticas. No se trata únicamente de sumar más o menos ediles en los plenos.
La última muestra de apoyo de Colau a Collboni se dio en el pleno del 5 de octubre. Entonces, en respuesta a las duras presiones de los concejales de PDECat, ERC y la CUP, Colau dijo que su segundo teniente de alcalde no compartía la
La última muestra de apoyo de la alcaldesa a Collboni se produjo en el pleno celebrado el pasado 5 de octubre
aplicación del artículo 155, que Collboni estaba mostrando una actitud dialogante muy oportuna, que no encontraba ninguna razón para romper su pacto... Pero desde aquella fecha, a pesar de que los envites independentistas son cada día más virulentos, la alcaldesa guarda silencio sobre su alianza.
Ni un guiño ni un gesto ni otra sonrisa... Ni de la alcaldesa Colau ni tampoco de ninguno de sus concejales. De hecho, en las últimas y sucesivas sesiones plenarias los concejales de BComú no tuvieron problemas en alinearse junto a las fuerzas independentistas, en dejar de lado a los socialistas en unas cuantas votaciones. Además, algunos cargos comunes cercanos al independentismo no dudaron en elogiar a Jordi Ballart luego de que dimitiera como alcalde de Terrassa y abandonara las filas socialistas. La desconfianza que el PSC despierta entre muchos comunes crece a medida que la situación política en Catalunya se tensa.