Bancos castigados
La CNMC califica la infracción de muy grave y las entidades recurrirán
La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia sanciona a CaixaBank, Santander, BBVA y Sabadell por haberse concertado para ofrecer productos derivados.
La Comisión Nacional del los Mercados y la Competencia (CNMC) sancionó ayer a cuatro bancos por haberse concertado para ofrecer productos derivados. Estos bancos generaban al cliente “la apariencia falsa de que se fijaban condiciones de mercado” cuando en realidad no era así. A CaixaBank se le multa con 31,8 millones de euros; al Banco Santander, con 23,9 millones; a BBVA, con 19,8 millones y al Banco Sabadell, con 15,5 millones.
Competencia estima que se trata de “una infracción muy grave”. La investigación se ha llevado a cabo porque una empresa dedicada a la explotación de parques eólicos denunció las entidades financieras. Después, 22 empresas, correspondientes a 43 operaciones, han aportado información de productos derivados asociados a créditos sindicados entre los años 2006 y 2016. Los derivados eran utilizados como cobertura de riesgo ante la evolución de los tipos de interés. La CNMC recuerda que no cabe recurso administrativo contra la decisión. En un plazo de dos meses sí se puede interponer recurso en la Audiencia Nacional y los bancos piensan hacerlo.
Fuentes del BBVA explicaron que “respetamos la decisión pero creemos que la resolución no ha valorado adecuadamente el contexto del mercado de financiación sindicada y, por tanto vamos a recurrir”.
Por otra parte, el presidente de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), Sebastián Albella, confía en que los argumentos que envió al Gobierno por la oferta de Atlantia por Abertis “surjan efecto” y éste no emprenda acciones legales.
La CNMV autorizó en octubre la opa de la italiana Atlantia y en diciembre los Ministerios de Energía y el de Fomento enviaron sendos requerimientos exigiendo al supervisor la revocación de la autorización. El regulador respondió que la oferta del grupo italiano cumplía los requisitos y mantuvo el permiso.
Preguntado por la contraoferta de de ACS, el directivo se limitó a decir que el proceso está “muy avanzado”. Una vez que la oferta se apruebe se abrirá el plazo de aceptación de la misma y podría desencadenar una guerra de opas. Se prevé que los dos ofertantes, puedan elevar el precio. En caso de ser así, en los cinco últimos días de aceptación de la segunda, la CNMV pediría ofertas en sobre cerrado y en caso de que la diferencia de precios sea inferior al 2%, por la ley de opas, el primer oferente, en este caso Atlantia, podría elevar el precio final.
Albella también recordó que para conceder la autorización a la oferta de ACS no es necesario contar con los permisos de Bruselas, sino que la CNMV puede dar el beneplácito cuando considere que la empresa ha presentado los requerimientos necesarios. El número uno de la CNMV aseguró que el organismo trata de acelerar los procesos de compra por el bien de los accionistas e inversores. Y recordó que la opa de Colonial sobre Axiare se ha resuelto en un periodo de tiempo relativamente corto. “Mientras estos procesos siguen abiertos supone una enorme perturbación para el mercado”, aseguró.
Albella, que presentó el plan estratégico de la CNMV para el 2018, señaló que se va a crear durante este año una subdirección de fintech y ciberseguridad con el objetivo de prevenir los riesgos derivados del desarrollo tecnológico. También desarrollará iniciativas como el análisis de las posibles aplicaciones de la tecnología blockchain. El ejecutivo también anunció que se va a crear un observatorio de la banca en la sombra para conocer qué actores operan y qué tipo de préstamos alternativos a la banca realizan.
La CNMV confía en que el Gobierno no emprenda acciones legales relacionadas con la opa a Abertis