Iceta augura más división con un “Govern de confrontación” soberanista
Se terminó el baile. Ayer en Terrassa, donde el PSC celebró su mitin de campaña, el candidato a la Generalitat, Miquel Iceta, renunció al ritmo del Don’t stop me now de los Queen que ha caracterizado los primeros cuatro días de campaña de los socialistas. Quizás porque no estaba su pareja de baile, Pedro Sánchez... quién sabe.
Sin el secretario general del PSOE, Iceta centró sus reproches en las fuerzas independentistas y alertó que un gobierno de concentración de los soberanistas sería un gobierno de “confrontación” y de “disgregación”, ya que a su parecer dividiría a los catalanes, los separaría del resto de España y los sacaría de la Unión Europea.
Al acto en Terrassa acudieron la presidenta de Baleares, Francina Armengol, el portavoz de los socialistas en la Asamblea de Madrid, Ángel Gabilondo, el exlíder del PSC, Pere Navarro, y el alcalde de la ciudad, Jordi Ballart.
Igualmente, Iceta apostó por el diálogo y el acuerdo y aseguró que a los independentistas “no se les tiene que decir sólo que no”, sino “ofrecerles una solución a los problemas, y sobre la mesa ahora sólo hay una solución, la reforma de la Constitución en un sentido federal”. Ayer, sin embargo, Mas y Rajoy no recibieron tantos reproches como otras ocasiones y la novedad fueron las críticas a Ciutadans. Iceta les acusó de “dar lecciones” y que mientras los de Rivera aseguran que acabarán con la corrupción “decidieron que en Madrid continuara el Gobierno del PP de la Gürtel, Púnica, Bárcenas, en lugar de hacer presidente a Gabilondo.”
Por su parte, Armengol para ofrecerse y trabajar codo con codo para mejorar la financiación de las dos comunidades autónomas, ya que “si Catalunya sufre un cierto ahogo económico, las Illes todavía más!”, remachó. El exministro de Educación, Ángel Gabilondo, hizo un ruego a la audiencia: “Los necesitamos muchísimo. Sin ustedes somos poca cosa. Qué les puede decir un señor de Madrid: que nos hacen mucha falta, que no se marchen. Sin ustedes somos menos y somos peores”.
Por otra parte, justo antes de empezar el acto, Iceta hizo responsable al Gobierno de Mas de la suspensión de la Agencia Tributaria Catalana por parte del TC: “Las cosas mal hechas acaban mal. Nosotros ya advertimos que la creación de estructuras de Estado sin negociación y sin hacer las cosas bastante bien jurídicamente tenía los pies de barro”. El líder del PSC advirtió que “se está vendiendo una gran estafa que podría producir una gran frustración”.