Catalunya, país de acogida
Refugiado es, según el diccionario de la Real Academia Española, la “persona que, a consecuencia de guerras, revoluciones o persecuciones políticas, se ve obligada a buscar refugio fuera de su país". Para garantizar la plena integración de las personas refugiadas en Catalunya, el Departament de Treball, Afers Socials i Família ha iniciado un programa catalán propio de atención a las personas refugiadas. Éste representa un cambio de modelo respecto al programa estatal de acogida y se orienta a atender las necesidades básicas de las personas refugiadas y ayudarlas a alcanzar una independencia social y laboral. Los beneficiarios del programa –personas refugiadas que aún no han alcanzado una autonomía personal suficiente o que se encuentran en situación de exclusión social– deben estar empadronados en Catalunya y disponer de unos ingresos anuales inferiores a la renta mínima de inserción.
UN PROGRAMA, TRES EJES
El programa establece que cada refugiado pueda seguir un plan individual de actividades que fomente su autonomía centrado en tres ejes: el aprendizaje de las lenguas, la orientación e inserción laboral, y la participación social. El programa incluye una ayuda económica durante 12 meses que debe servir para garantizar las necesidades básicas: vivienda, suministros, alimentación, ropa, medicinas, escolarización, etc.
Por su parte, las personas refugiadas se comprometen a aprender catalán y castellana, seguir las actividades de orientación, formación e inserción laboral del programa y participar en actividades del Plan que les ayuden a establecer vínculos sociales con personas y entidades del entorno. Estas actividades se llevarán a cabo con un Grupo de Acogida –integrado por entre tres y cinco mentores– que los acompañará en el logro de estos objetivos.