La oferta de Rajoy
A Mariano Rajoy aún le tiemblan las piernas después de haber hablado con Donald Trump, quien sin duda lo ha dejado momentáneamente inconsciente y le ha afectado a la visión por deslumbramiento. Y así, a tientas, sin saber lo que hacía ni lo que decía, dándose ínfulas de jefe de Estado, le ofrece al amigo Trump su mediación para ser el interlocutor de su país para Europa y América Latina, así como para el norte de África y Oriente Medio (por poco más, para todo el mundo).
Vamos, señor Rajoy, un poco de seriedad, que de sobra sabemos que es usted incapaz de resolver en su propia casa serios problemas de convivencia que se le echan encima y que no deberían dejarle dormir por más que crea que el TC le va a sacar siempre las castañas del fuego.
Quizás su amplio conocimiento de idiomas, o quizás su vanidad sobrealimentada por la presencia telefónica de tan alto mandatario, es lo que le ha llevado a tan descabellado ofrecimiento sin reparar en que convendría antes resolver nuestros propios problemas.
PAT VILLANUEVA
Vilassar de Mar