Fomento no logra frenar la huelga de los estibadores
La patronal denuncia actos encubiertos previos al paro oficial
Los trabajadores piden un registro de estibadores que evite la entrada de empleados a coste menor
La primera reunión entre el Ministerio de Fomento y los estibadores y la patronal sobre la reforma del modelo de la estiba terminó ayer sin acuerdo, por lo que los paros parciales convocados para los días 20, 22 y 24 de febrero prosiguen y amenazan con paralizar los puertos. El Gobierno, alegando el cumplimiento de una sentencia europea, quiere acabar con el monopolio por el que se rigen los servicios de carga y descarga de los puertos desde hace años.
El secretario de Estado de Infraestructuras, Julio Gómez-Pomar, recordó ayer, tras la reunión, que la reforma del modelo de la estiba, que se tramitará a través de un real decreto ley y que tendrá que ser posteriormente convalidado por el Congreso, obedece al cumplimiento de una sentencia condenatoria del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) de diciembre del 2014.
El coordinador general de la Coordinadora Estatal de Trabajadores del Mar (CETM), Antolín Goya, insistió en que una las principales reivindicaciones de los sindicatos es la creación de un registro de trabajadores, que, según GómezPomar, la Comisión Europea (CE) rechaza de forma contundente y supone una de las “líneas rojas” del organismo europeo.
Goya subrayó ayer que el registro es su principal demanda para lograr un acuerdo sobre la reforma y desconvocar los paros convocados en los puertos a final de mes. Los sindicatos de estibadores –el CETM es el mayoritario– piden, asimismo, que en la negociación participe, además de Fomento y la patronal, algún representante de la Comisión Europea (CE), que es quien decide si el nuevo modelo cumple con la sentencia. Gómez-Pomar respondió que la CE no entra en procesos de negociación, salvo con los gobiernos, por lo que no cree que acepte sentarse con las partes implicadas.
A pesar de mantener posturas tan alejadas, el ministerio y los estibadores han manifestado su voluntad de seguir dialogando, aunque Gómez-Pomar ha dejado claro que, aunque el Gobierno está abierto a aportaciones de los sindicatos, estas tienen que estar dentro del marco de la sentencia. El secretario de Estado recordó que España se enfrenta a una posible sanción por parte de Europa, por lo que debe aprobar la reforma en el Consejo de Ministros del próximo viernes, 17 de febrero.
Ayer, el secretario general de CCOO, Ignacio Fernández Toxo, acusó al Gobierno de “dejar pudrir” el conflicto con los estibadores españoles “por razones de oportunidad política”, con la intención de que se avance en la liberalización “absoluta” de la carga y descarga.
Por su parte, la Asociación Nacional de Empresas Estibadoras y Consignatarias de Buques (Anesco) ha denunciado que los estibadores han bajado en los últimos días su rendimiento un 70% y el portavoz de su asamblea, Juan Aguirre, hizo un llamamiento a los trabajadores a que cesen esas “huelgas encubiertas”, tras la apertura de la negociación.
Fomento volverá a reunirse con representantes de los estibadores y patronal el martes 14 de febrero, aunque parece difícil que se pueda lograr un acuerdo consensuado.
El sector agrupa a más de 6.000 trabajadores. Algunas fuentes apuntan a los salarios medios de esos trabajadores rondan los 68.000 euros anuales. Un cambio en las condiciones podría presionar a la baja los sueldos hasta reducirlos a más de la mitad, según algunas fuentes.