El mundo del futuro
En su primera colección el genio del diseño británico Alexander McQueen dejó su impronta genética colocando un mechón de su pelo en la etiqueta. Seis años después de su muerte una estudiante eslovena de 27 años de la escuela Central Saint Martins de Londres ha realizado, gracias a la información genética de este pelo, una chaqueta y un bolso de piel de McQueen, Pure Human. No se trata de una provocación, ni siquiera de un proyecto con fines comerciales, que podrían ser impresionantes, su objetivo es concienciar acerca de la importancia de la protección de información biológica y evidenciar el vacío legal que existe en este campo. Gorjanc ha presentado su proyecto en el festival DEMO, organizado por ADI-FAD.