Cuentos de boinas rojas

Marià Vayreda (Olot, 1853-1903) es

autor de dos grandes libros: Records

de la darrera carlinada, relatos sobre su paso por la tercera guerra carlista;

y La punyalada, obra psicológica y paisajística,situadaentrelaprimeray la segunda carlistada, misteriosa novelaprefreudianaque,segúnsehaespeculado, esconde algún episodio grave y violento de la vida del autor, quizás simplemente lo que vio de muyjovenenlaguerra(comosesabe, la crudeza de las guerras civiles del XIX fue tema de debate hasta en el Parlamentoinglés).

Sangnovaessuterceraobra. Novela de tesis, patriótico-religiosa y conservadora,desde1900nosehavuelto aeditar.Algohaydesuvetadoctrinal en las peores piezas de esta antología decuentosdeVayreda–seleccionada por la profesora Antònia Tayadella– que acaba de publicar la editorial Lapislàtzuli. Por su corte sentimental o por un exotismo postizo, otros cuentos son tambiénmuydiscretos. Yeso queellibromuestralos15mejores de los27queescribióeldeOlot. Lomejorestáentrespiezas.EnLa

fi del Renegat, Vayreda describe con viveza el ambiente de carreteros y hostalesdelCollsacabra,aunquealfinaldaunasoluciónmoralistaparano asustardeltodoaloslectoresdelarevista L’Olotí, quesequejarondelarudeza del relato. El roure dels penjats recrea la leyenda de unos bandoleros ajusticiados hacia 1700; Vayreda muestra sus dotes de paisajista de la Garrotxa, aquí de un modo bastante tenebroso; el cuento opta por una soluciónfantásticayconvincente.

También es algo sobrenatural el mejor relato: L’Afusellat. Volvemosa las guerras carlinas, en este caso de los Matiners. Vemos a un carretero, tosco y turbio, llamado l’Afusellat. Por no delatar el lugar de huida del generalCabrera,lofusilarán.Traslos disparos –en una guerra en que sólo una bala de mil daba en el blanco, según se decía–, el hombre cae por un terraplén. Nosabemos si ha ido a parar al infierno y unos demonios lo atormentan o si el pelotón de soldados isabelinos corre campo a través para rematarlo. De esta ambigüedad surgeuncuentoantológico,conocido porloslectores,yqueligaconlamirada distante de Records de la darrera

carlinada y con el paisaje agreste y misteriosodeLapunyalada. |