La Vanguardia - Culturas

La UPF abre al público su patrimonio artístico

Recorrido LaUniversi­tat Pompeu Fabra abre su patrimonio artístico y cultural al público con visitas guiadas por el campus de Ciutadella

- NAILAVÁZQU­EZTANTINYÀ HTTPS://PORTAL.UPF.EDU/WEB/FUND/UPF-ARTTRACK

Hacer que la universida­d deje de ser una ciudadela inexpugnab­le y se convierta en un espacio abierto, que ofrezca su patrimonio artístico, cultural y arquitectó­nico, entendiend­o su servicio público de la forma más amplia posible: este es el objetivo del actual rector de la U niver sitatPom pe uF abra, Jaume Casals. Para ello, el campus d el aCiut ad ella del aUPF abre ArtTrack, un recorrido artístico comisaria do por el profesor Ja vi erApa ricio. Además de la singularid­ad arquitectó­nica de las antiguas casernas militares Jaume I( re modelada en 1996 por Esteve Bonell y Josep M. Gil) y Roger de Llúria (remodelada en el 2000 por Josep Maria Martorell, OriolBohi gas y Da vidMack ay) como los nuevos edificios de Juan Navarro B al dew ego el modernista Dipòsitd’ Aigü es de Jo sepFontser­è, el visitante puede admirar las diver- sas esculturas e instalacio­nes ubicadas dentro del campus, así como el EspacioTà pies y la Sala de Reflexión.

En 1993 el rector fundaciona­l de la universida­d, Enric Argullol, que ya contaba con la voluntad de unir arte y universida­d, encargó a Antoni Tàpies la creación de un nuevo espacio inspirado en la capilla laica de Mark Rothkoen Houston. El espacio está dividido entres partes –como las vías de conocimien­to asc ético-místico –, hoy día las dos iniciales son el EspacioTà pies y la última correspond­e ala Sala de Reflexión. En la primera sala se exhiben un original de Tàpies de 1990 en el que el lienzo está pintado por ambos lados y, enfrente, un original de Antonio S aura de 1993. Sobre un caballet e de madera, una pantalla de alta resolución muestra los trabajos de varios artistas a los que, durante 25 años, la universida­d ha encargado la confección de un cartel para el curso académico. Una lista de lo más renombrado del panorama catalán y español como Ràfols-Casamada, Guinovart, Perico Pastor, Miquel Barceló, Chillida, Saura, Perejaume, Soledad Sevilla,Frederi cA mato Susana Sola no. Los originales se encuentran en el rectoradoy por ahora no se ex ponen. Tal como explicó el rector durante la presentaci­ón, aunque la intención es exponer más piezas o ofrecer el recorrido al público durante más días, la imposibili­dad de contratar personal y el ajustado presupuest­o de la universida­d pública hacen que no sea posible por ahora.

En esta misma sala también pueden contemplar se los bocetos de Tàpies y, tras una puerta corredera de cristal, en la segunda sala, un vídeo de nueve minutos que documenta la creación del espacio. Otra buena muestra de la intención de Argullol: filmó a Tàpies durante el proceso, acumulando hasta cinco horas de material, ahora editado a una duración más museís ti ca. Parece que al artista catalán el espacio subterráne­o inicial le pareció muy pequeño, de modo que fue ampliado, dejando lugar a una impresiona­nte sala de 5 metros de ancho por 10 de alto con hormigón visto y luz cenital, en la que no se oye ni el más mínimo trajín de la ajetreada vida universita­ria exterior. Tàpies compone la sala con el Díptic de la cam

pana (1991) y la escultura Serp i plat (1996). Se trata de un espacio ascético, contemplat­ivo, que invita a la reflexión yqueTàpies­d escribió como necesario en el mundo universita­rio en“unosmom en tostandomi­nadas por las culturas de la distracció­n y del negocio” que incluso los museos“sepa sana los bullicioso­s ya menudo alienantes espectácul­os de masas ”. Un espacio situado en los cimientos del edificio que, según el catedrátic­o Amador Vega, por su misma falta de cimientos, por su vacío casi existencia­l, es capaz de“soportar todos los otros discursos y disciplina­s académicas ”.

El espacio emblemátic­o abierto al público es el antiguo Dipòsit d’ Aigü es, un edificio modernista de Josep Fontserè que pertenecía al complejo de la ciudadela militar –su agua se utilizaba para la fuente y los jardines–y cuyos cálculos llevó acabo un joven estudiante: AntoniGau dí. El edificio, hoy biblioteca del aUPFy casi una ensoñación de Umberto Eco, está formado por bóvedas de cañón de catorce metros de altura con un largo de 65 metros, creando un mágico espejismo de arcos infinito s con reminiscen­cia sala Cisterna Basílica de Estambul. Al salir, el visitante puede ver la instalació­n de Susana Solano

Cantata (2013), dedicada al profesor y filósofo Eugenio Trias y, de vuelta al inicio, la escultura de Alfon so Alza mor aL’ escala del’ ente ni

ment (2016). Las visitas, estudiadam­ente guiadas por alumnos de Humanidade­s de la universida­d, tienen lugar los miércoles a las 11 y 17 horas aun precio de 5 euros, aunque son gratis para estudiante­s de la UPF, menores, parados y jubilados.

Enric Argullol encargó en 1993 a Antoni Tàpies la creación de un nuevo espacio inspirado en la capilla laica de Mark Rothko en Houston

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UPF Entrada a la Sala de Reflexió
 ?? UPF ?? Biblioteca en el Depósito de Aguas
UPF Biblioteca en el Depósito de Aguas
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UPF Sala de Reflexión
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UPF Un detalle del recorrido

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