RASPUTIN SEGÚN MARIO VERDAGUER
En el centenario de la revolución rusa, Calambur recupera la biografía de Rasputin escrita en 1930 por Mario Verdaguer (Maó, 1885-Barcelona, 1963). Para el traductor y escritor vanguardista, que fue periodista y crítico de este diario entre 1928 y 1936, el controvertido personaje era la perfecta encarnación de la decadencia del imperio ruso que incubaría el bolchevismo y la revolución. Hijo de campesinos y casi analfabeto, violador y ladrón, Grigori Yefímovich Rasputin dijo haber tenido una revelación a la edad de 30 años y se autoproclamó santo, místico y sanador. Con estas credenciales, el (como se conoce a los guías espirituales en la religión ortodoxa) logró introducirse en la corte y convertirse en uno de los personajes más influyentes del imperio, consejero y amigo íntimo de la emperatriz Alexandra Fiódorovna.
A partir del estudio de numerosa documentación contemporánea a Rasputin (correspondencia, diarios personales, prensa o expedientes judiciales), Verdaguer lo retrata como a un personaje astuto y manipulador, egocéntrico y carente de escrúpulos, fantasioso, dramático, dotado de un gran carisma personal y dominado por una absoluta ambición de poder. El perfecto líder de una secta. Un autócrata. Con una personalidad fuerte y exuberante de la que carecía, por cierto, el auténtico “autócrata de todas las Rusias”, el zar Nicolás II, y un físico imponente, hermoso, de clarísimos y penetrantes ojos grises. No sorprende que sus principales valedoras fueran las aristócratas, con la zarina a la cabeza. Siendo un religioso, Rasputin operaba además en un terreno tradicionalmente femenino.
Se trata de una biografía novelada que no pretende cubrir la vida entera de Rasputin. Nada se nos dice de su infancia, por ejemplo, aunque sí algo de sus antecedentes. Da la impresión de querer mostrar el auge y la caída del personaje en el que Grigori Yefímovich se convirtió: el que logró tener en sus manos la voluntad del último zar de Rusia y la de su esposa, símbolo de toda una corte decadente, supersticiosa, notablemente ignorante y violenta. Aunque ordenado cronológicamente, no es un relato lineal sino un fresco, una sucesión de episodios significativos narrados con notable fuerza dramática. Es además un texto moderno por su naturaleza fragmentaria, que alterna el relato más novelado con otro de carácter más periodístico o testimonial. Cabe destacar el interés del prólogo, muy adecuado en un texto que se publica noventa años después de haber sido escrito, ilustrativo del estilo del autor y su intención: la voluntad de acercarse a Rasputin como personaje que encarna la decadencia del imperio ruso y cuya personalidad y la magnitud de lo que logró tienen un indudable atractivo literario. El libro es el primero de los tres volúmenes en los que Calambur publicará la biografía completa. Una sugerente aproximación al tiempo que precedió a aquellos diez díasqueestremecieronalmundo. CALAMBUR. 180 PÁGINAS. 15 EUROS