Religión, y no dogmas
“La religión, la espiritualidad, interesa, y mucho. Lo que ya no interesa es el dogmatismo”, me argumenta contundente el editor Ignasi Moreta. “En realidad seguimos haciéndonos las mismas preguntas que se hacían nuestros abuelos”.
Algo de razón debe de tener, porque el Foro con el que Fragmenta, el sello que dirige, celebra sus diez años, ha registrado doscientos inscritos. En un soleado sabado de mayo se han concentrado a partir de las 9,30 de la mañana, tras pagar diez euros ( a descontar del precio de cualquier libro de la editorial que se adquiera), en la Casa de Espiritualidad Sant Felip Neri de Barcelona, donde a lo largo del día se suceden los debates. Participan, señala Moreta, “los mejores autores de la casa”. La puso en marcha en el 2007 con Inês Castel-Branco y la intención de publicar “libros no religiosos sobre religiones”, obras para un público amplio que cultiven “los interrogantes, la búsqueda, la indagación, la apertura, los tanteos y los descubrimientos”. Trabajan en catalán y castellano y cuentan entre sus autores más difundidos a Raimon Panikkar, la psicoanalista Marie Balmary o el teólogo Paul Knitter, pionero en la aproximación del cristianismo al budismo... Y también publican clásicos, el más reciente, los Contes cabalístics del rabino ucraniano Nahman de Bratslav, en edición y traducción de Joan Ferrer i Jordi Sidera.
La Casa Sant Felip Neri es un espaciosorpresa en la zona de Tres Torres, rodeada de un amplio jardín con grandes pinos. Me cruzo con Joan-Carles Mèlich, quien ha impartido un taller sobre filosofía literaria, y escucho al veterano especialista en Kant , Pere Lluís Font, debatir con Ramon M. Nogués un tema clásico: la capacidad humana de percibir el infinito. Salen a relucir el “sentimiento oceánico” de Romain Rolland y Freud, la duda sobre si aquello que es finito puede percibir lo que no lo es, la idea de que lo infinito, “aplicado a Dios, sabe a poco”...
Encuentro a Jordi Pigem, antes en la new age y ahora en la indagación postmaterialista, y me presentan al teólogo Xavier Melloni, quien disecciona los Ejercicios de Loyola. En Barcelona se cruzan muchas líneas culturales, pero no me cabe duda de que editorial Fragmenta, como Kairós o Plataforma, ha escogido una que está llamativamente viva.