La verdad y la vida
Roberta Marrero (Gran Canaria, 1972) se define así misma como feminista, bruja y artista. Es una figura célebre, de las que reciben esa aceptación en redes sociales en forma de cientos de corazones y likes. Su especialidades el collage rabioso y el grafismo irreverente. La base son iconos, mitos e imágenes de poder, aquellas que (en palabras dela artista) mesmerizan al espectador, tales como Bowie, Franco, Mao Tse-Tung, Hello Kitty, referentes reconocibles de la política, el Hollywood clásico o el rock. Marre rol os agita y golpea en su coctelera y el combinado resultante es, desde el criterio estético, personalísimo y subyugante. Sin embargo, es imprescindible referirse a la persona de Roberta Marrero al hablar de su trabajo, pues es este un ejercicio confesional y de desnudamiento. En su reciente novela gráfica El bebé verde (Lunwerg), Marre ro realiza un ejercicio de sinceridad radical para hablar de su condición de transexual.
La obra de Marrero hoy es un regurgitado de las influencias absorbidas en su itinerario vital, un camino difícil en el que los cómics, el cine clásico, las revistas para adolescentes y los mitos de la contracultura libre y feliz fueron la tabla de salvación para un individuo que era diferente. El lenguaje de Marrero se ha sofisticado, perfilando temáticas recurrentes como la sexualidad y la muerte, el amor por lo siniestro, el feminismo o la toxicidad del mito del amor romántico. Sus iconos del poder bombardeados por referencia sal sexo, ala muerte o al cristianismo sonl amaneraen quedes figura con brillantez algunas patrañas sobre lasques esostiene la sociedad occidental. Mar re ro es la verdad y la vida, y a la vez, las mentiras y la muerte.