Acción artística, acción política
Tesis Coinciden en elMacba diferentes exposiciones que encaran los proyectos creativos desde el espíritu crítico, utilizando géneros y disciplinas como herramientas para abordar conflictos
Pensar la acción artística como herramienta de crítica y reivindicación exige un volver atrás en el tiempo. A pesar de las grandes etiquetas que la propia historia del arte utiliza para designar a algunos movimientos artísticos, tales como arte conceptual o arte político, pienso que el arte siempre fue conceptual y siempre fue político, aunque sea de forma implícita. Lo que sí se vuelve necesario es concretar cuándo y cómo nace la voluntad de reivindicar la presencia de la mujer en el arte de un modo activo y cómo dentro de este ciertas artistas han llevado a cabo un discurso que permite hablar de la situación de la mujer no sólo en el arte sino en la sociedad. En este sentido Martha Rosler (Nueva York, 1943) fue una de las pioneras en los años 70 en utilizar el lenguaje del vídeo como herramienta de análisis social y político desde una perspectiva feminista. Durante casi cincuenta años sus obras han examinado con una mirada crítica los distintos mecanismos mediante los que se construye la cultura occidental y el papel que la mujer juega dentro de ello.
Rosler es una de las artistas más prolíficas en este campo, desde sus inicios hasta ahora, sus trabajos siguen haciendo hincapié en las des- igualdades que imperan y forjan la cultura occidental. Su trayectoria incluye performances, fotografías, instalaciones y ensayos. La exposición que ahora podemos ver en el Macba, Colección Macba. Martha
Rosler: God bless America!, que acoge en el título el nombre de uno de sus trabajos, se centra en la producción videográfica de la artista a través de once obras realizadas desde los años setenta hasta el 2006. La exposición no sólomuestra los ejes críticos de su trabajo, sino que establece a su vez un diálogo con otras exposiciones presentes en el museo como las de Akram
Zaatari y Forensic Architecture. Es en este sentido desde el que la relectura que permite llevar a cabo la selección de proyectos de Rosler,
Martha Rosler fue una de las pioneras en los 70 en el uso del vídeo desde una perspectiva feminista
no sólo trabaja con la colección del museo sino que establece puentes con otros discursos contemporáneos.
El trabajo de Martha Rosler aborda la política como ejercicio ideológico del poder, la jerarquía de clases y el control social sobre el cuerpo de la mujer.
Junto a vídeos antibelicistas como el que da título a la exposición, las piezas seleccionadas podemos dividirlas en dos grupos, por un lado abordan problemas presentes en los setenta que aún hoy siguen vigentes: inmigración, explotación laboral, complicidad entre corporaciones multinacionales o regímenes dictatoriales. Y por otro lado, aunque siempre en diálogo con este primer grupo, encontramos trabajos que analizan problemáticas derivadas de cuestiones relativas al género: exploración de la esfera doméstica, instrumental izaciónd el cuerpo de la mujer por parte de los medios de comunicación, la industria de la moda y la publicidad, así como las transgresiones de la vida privada cometidas por el poder del Estado. Rosler permite reflexionar desde múltiples puntos de vista, profundizando de un modo sutil en ámbitos que abarcan el marco legal, científico e incluso médico. A través de todos sus trabajos podemos pensar lo poco que han cambiado las cosas en los últimos cincuenta años: racismo, machismo, imperialismo… parecen seguir siguiendo los ismos de nuestra era.