Lita Cabellut, la confirmación
La pintora formada en El Masnou, y reconocida en todo el mundo, expone en la Fundació Vila Casas
La de Lita Cabellut (Sariñena, Huesca, 1961) en los nuevos Espais Volart de la Fundació Vila Casas se perfila como una de las exposiciones clave de la temporada en Barcelona. La artista llega a la ciudad en la que creció para mostrar el trabajo con el que ha entusiasmado en galerías de Londres, Nueva York, París, Singapur o Dubái. Llega precedida de la fama internacional que ha conseguido por la fuerza de sus piezas, porque la revista ‘Artprice’ la colocó en el 2015 como la mujer artista española más cotizada –entre los contemporáneos, sólo por detrás de Miquel Barceló y Juan Muñoz– y por la historia de su infancia no exenta de polémica, ya que sus hermanas han querido matizarla. De origen gitano, creció en el ambiente marginal del Raval hasta que la adoptó una familia del Masnou que tuvo dos grandes aciertos: pedirle al pintor Miquel Villà que le enseñara a dibujar y llevarla al Museo del Prado. Ante ‘Las tres Gracias’ de Rubens supo que ella también sería artista. Hizo su primera muestra a fines de los 70, cuando aún era una adolescente en el Maresme. Desde hace más de 30 años vive en Holanda; en La Haya, su casa-taller puede considerarse entre sus obras más impresionantes. En 2013, la Fundació Vila Casas mostró con gran éxito su ‘Trilogía de la duda’. En sus cuadros de grandes dimensiones, rostros y cuerpos de personajes perturbadores muestran lo bello y lo terrible de la existencia, esas dos partes que Lita Cabellut parece conocer tan bien. En una conversación en dos fases, por teléfono y vía e-mail, hablamos de todo ello.