Novedades en castellano
Las nuevas novelas de Juan José Millás o Padura se suman a propuestas narrativas de otros autores como Marta Sanz, Miquel Molina, Andrés Neuman o Mónica Ojeda. Mientras que Vargas Llosa, Muñoz Molina o Aramburu presentan libros de carácter más heterogéneo
Inquietante. Así es la realidad que reflejan buena parte de las novedades de narrativa en castellano, que en el nuevo año dibujan sociedades dominadas por el miedo y la ansiedad, con una buena cantidad de obsesos, crímenes y perversiones repartidos por sus páginas. La exploración de lo abyecto, los límites de la salud mental e incluso el terror, más o menos intenso, como género en boga. Frente a ello, algunas propuestas más clásicas de los grandes nombres que cuentan, de antemano, con el favor del público asegurado.
Triángulo loco
Es Amour fou (Anagrama, marzo) algo parecido a una novela negra donde Marta Sanz (Madrid, 1967) cuenta con tres personajes, por un lado Lala y Adrián, que son pareja, y por el otro el pintor y acosador Raymond, antiguo novio de ella, que escribe en un cuaderno negro y, tras mucho tiempo espiándoles –ellos no solo lo consienten sino que a menudo actúan para él– se las apaña para que la policía detenga al marido. Se irán dando versiones diversas y contradictorias de lo sucedido.
Principios sólidos
El amor y el terror son los ejes que sustentan Que nadie duerma (Alfaguara, febrero), nueva novela de
Juan José Millás (Valencia, 1946) protagonizada por Lucía, mujer que pierde su empleo de programadora informática y decide dar un vuelco a su vida basándose en unos principios sólidos, a saber: 1) será taxista; 2) recorrerá las calles de Madrid —o tal vez Pekín— con la esperanza de que se suba a su taxi un vecino desaparecido del que está enamorada; y 3) todo lo importante que le suceda tendrá la banda sonora del Turandot de Puccini. Un mundo, ya ven, muy millasiano.
Fukushima, mon amour
El argentino-granadino Andrés Neuman (Buenos Aires, 1977) nos presenta, en Fractura (Alfaguara, febrero) al señor Watanabe, ejecutivo de una empresa de televisores y superviviente de la tragedia nuclear de Fukushima. Cuatro mujeres que lo conocieron –y amaron– cuentan lo que saben en otros tantos monólogos, pronunciados en idiomas y países diferentes.
El hombre detrás de ‘Patria’
¿Qué escribir después de Patria ,el gran superventas de la narrativa española, del que ha derivado incluso una serie en HBO? Fernando Aramburu (San Sebastián, 1959) ha tenido claro que debía cambiar totalmente de registro y se ha ido al intimismo:
Autorretrato sin mí (Tusquets, marzo) es seguramente su obra más personal, en la que más se desnuda y habla de sí mismo, a través de escenas cotidianas, en las que aborda las relaciones familiares, las paternofiliales, las dichas y las sombras de todos los días.
Muñoz Molina camina
Un andar solitario entre la gente (Seix Barral, febrero) es el ilustrativo título de lo último de Antonio Muñoz Molina (Úbeda, 1956), que recoge los paseos dispersos del propio autor, con lápiz en la oreja y recogiendo cosas de la calle, en la estela vagabunda de caminantes de la literatura como Baudelaire, Poe, Benjamin, Melville o Lorca e incluso algunos representantes de las artes plásticas, como esos abanderados de la basura y el reciclaje con mensaje que fueron Diane Arbus o Dubuffet.