Un cuento ilustrado del miembro del Tricicle
Paco Mir se dibuja un chiste cada día. “Por si acaso”, dice. Pero no será por falta de trabajo. Miembro del popular grupo humorístico Tricicle, está actualmente de gira con Hits, un espectáculo de los mejores gags de la historia del trío. Una gira que sólo ha interrumpido para recoger el premio Destino Infantil-Apel·les Mestres, que “hace 37 años llevo queriéndolo ganar” y que este año ha conseguido con ¿De qué color soy?, un divertido cuento ilustrado en que Paco Mir (Barcelona, 1957) explora las emociones a través del color de la piel.
No es la primera vez que se dirige al público infantil.
No, profesionalmente comencé en el
donde publiqué cada semana durante dos o tres años. Ahora estoy con unas adaptaciones para la temporada escolar del 2019 en el teatro Victoria de La plaça del Diamant.
¿Pero cuento, cuento?
Hice uno como guionista hace seis años, que lo ilustró Raquel Díaz Reguera. También hice uno muy especial que era un cuento hecho con cubos que se podían combinar de forma que se podrían construir muchos cuentos diferentes.
Le hacía cuentos a su hijo.
Sí, es un público muy agradecido, la verdad. Eran cuentos para sorprender, con giros inesperados. A veces también hacía cuentos en postales, que es algo que me hacía a mí mi abuelo. Hacer un dibujo y dividirlo en ocho postales de forma que sólo se podía leer cuando se recibían todas.
En ‘¿De qué color soy?’ la editorial le pidió incluir una viñeta más, una de niños con el color de la piel de todos los lugares del mundo. ¿Impera más lo políticamente correcto en la temática infantil?
Actualmente estamos en un momento políticamente correcto y el humor, evidentemente, tiene que ser políticamente incorrecto. El humor es para hacer reír, no son declaraciones de intenciones. Muchas veces sólo es hacer reír, sacar la punta de algo, aligerar el peso de cualquier situación… No corren buenos tiempos porque se ha perdido el sentido del humor
¿Se contiene?
En este libro no.
Toca muchas teclas: dibujo, teatro, cine, tele y escritor… ¿Con qué se queda?
La sombra de Tricicle es tan grande que parece que antes que eso no has hecho nada, o nada importante. Yo soy escritor desde siempre, soy dibujante desde siempre y ahora parece que lo haga de repente. Me quedo con lo de ser dibujante, con el ingenio de un chiste, que es en lo que realmente soy bueno o me gusta.
¿Qué toma del teatro en sus dibujos?
En mis dibujos el entorno siempre incluye cosas para distraerte, siempre hay algún chiste pequeño que podría no estar, pero que está. Siempre hay movimiento, dentro de lo estático del dibujo. Eso es lo que tomo del teatro.
¿Interrelaciona lenguajes?
Del todo. Hay muchas cosas que me he robado a mí mismo que nacieron en el TBO y que las he utilizado con Tricicle. Chistes que después los hemos realizado con movimiento con Tricicle. Una idea se puede ilustrar, dramatizar, llevar al cine... Si la idea, es buena tiene mucha vida.
¿Algún proyecto cinematográfico?
Todo el mundo tiene un guión, yo también. Es otro reto, ochenta minutos que relacionan todo el mundo en una especie de caleidoscopio.