Deshacer el nudo

Análisis Horas de conversaciones son la base del nuevo libro de Enric Juliana y Pablo Iglesias. Recorren la historia sociológica de España, retratan a sus protagonistas y destierran las raíces de la complejidad del presente

Cuando el movimiento del 15-M ocupó las plazas, la reacción del statu quo fue condenatoria. No lo evidenciaron solo porras y desalojos. También la soberbia a la hora de desacreditar un movimiento que impugnaba el viejo orden estatal desde el corazón del espacio público. Un orden cuyos fundamentos se tambaleaban con la aplicación de las políticas de austeridad, ensombreciendo el horizonte de una sociedad de clases medias en fase menguante. Una cadena generacional se rompió entonces. La continuidad la bloqueó un nudo.

En los medios digamos mainstream –este lo es– no se supo calibrar el potencial transformador de esa indignación que proponía una reforma en profundidad de la mecánica democrática. Maldita hemeroteca. Sí nos lo contó aquí mismo Pepe Ribas, emocionado viviendo una segunda juventud, y sí intuyó su importancia un periodista intelectual –Enric Juliana (Badalona, 1957)– que ya era uno de los mejores analistas de nuestro presente (y que hace poco publicó ya un libro de entrevistas con Roger Palà). Tres años largos después del 15-M un partido que derivaba de ese momentum hacía que las placas tectónicas empezaran a moverse. Por entonces su líder –Pablo Iglesias (Madrid, 1978)– tenía un programa de entrevistas en una televisión emitido a través de internet. Invitó a Juliana, al que presentó como un DANI GAGO Gramsci de derechas. Conectaron.

Ha pasado el tiempo. Podemos se afianzó gobernando en capitales y comunidades. Hoy por hoy es socio necesario para Pedro Sánchez. Y durante esos años trepidantes la conexión Juliana/Iglesias –dos obsesos del análisis de la política– ha madurado. Ahora parece casi filial y su fruto más dulce ha sido este gran libro de conversaciones sobre el origen del mundo nos ha tocado vivir. Un mundo que está anclado en el pasado por la deuda de países y particulares y la incapacidad de la Unión para construir una alternati- va viable. “Esta crisis es de lo más relevante que ha ocurrido en Europa en términos políticos desde hace muchas décadas”, le dice el hombre de cuarenta al de sesenta. Un mundo ensombrecido por el miedo al futuro. “Realmente creo que hace falta ser franco con la gente y decir que se acerca un largo período de niebla e incertidumbre”, le dice el periodista al político recordando el impacto familiar que tuvo la crisis del petróleo en una familia de clase media badalonesa.

No es fácil resumir el contenido de las horas de conversación que son la base del libro. No es un diálogo improvisado. Se organiza por temas y cronología. Mientras lo leo parece que el tic tac de la actualidad siga sonando. Vamos de la génesis de la nueva izquierda en América Latina hasta la crítica a la gestión gubernamental del 1 de octubre y el discurso del Rey del día 3 pasando por la descripción de los nuevos populismos. El reloj del análisis español empieza en el siglo XIX, se para varias veces en Cambó, tiene el despliegue del Estado de 1978 como período central y llega hasta la moción de censura al presidente Rajoy.

Durante más 400 páginas se recorre la historia sociológica de España, se retrata a protagonistas y se diagnostica el estado del mundo de hoy a veces a partir de anécdotas pero casi siempre a través de datos y lecturas para formular interpretaciones no necesariamente ortodoxas sobre el estado de cuestión.

Iglesias se autorretrata como un político de izquierda que ha madurado y que tiene una obsesión: “Obsesión por gobernar”. ¿Cómo lograrlo? Nudo España es un libro de conversaciones que desentierra las raíces de la complejidad del presente, pero dicha complejidad se hace legible precisamente porque es conversada. No los leemos como una sucesión de monólogos sino que escuchamos el reto del diálogo auténtico: aquel que te lleva a matizar tus propios puntos de vista al interiorizar los del otro. Y descubrir esa matización en directo tiene una importancia ideológica de primer nivel que no creo que estuviera planificada. Se deshace un nudo.

Al reflexionar sobre nuestra historia reciente –en especial sobre la transición, el rey Juan Carlos y los años felipistas–, se va articulando una fórmula para desactivar uno de los principales cortocircuitos que la cultura política de la izquierda española debe resolver: la necesidad de dotarse de un relato compartido a través del cual pueda soldarse una alianza estable entre la generación que vivió el tránsito de la dictadura a la democracia y la generación a la que, tras la implosión del bipartidismo, le ha llegado la hora de acceder al poder. Este diálogo es un confiado diálogogeneracional.Funciona.

“Hace falta ser franco y decir que se acerca un largo periodo de niebla e incertidumbre” Se autorretrata como un político de izquierdas que ha madurado y anhela gobernar

ARPA. 445 PÁGINAS. 19,90 EUROS