Homenaje para un aniversario
Cuando José Sanchis Sinisterra decidió que la sede barcelonesa de su compañía, el Teatro Fronterizo, llevara el nombre de Samuel Beckett, se lo pidió prestado al irlandés. Le envió una carta. Le explicó su idea. Y recibió los parabienes del dramaturgo, que, poco después, murió. Hace ya treinta años. De la muerte de Beckett en París y de la inauguración de la sala en Gràcia, así que la sala (ahora en Poblenou, reconvertida en fábrica de creación) ha decidido dedicarle un ciclo en el que el estreno de Esperant Godot es sólo una de las piezas, como lo fue hace unos días Words and Music, espectáculo que llegó con dirección escénica de Nao Albet y musical de su padre, David Albet, fundador y director de la formación instrumental Barcelona 216.
El tercer montaje del ciclo será Beckett’s ladies (a partir del 12 de diciembre), que, con traducción y dirección de Sergi Belbel y la interpretación de Sílvia Bel, Míriam Iscla y Rosa Renom, reúne cuatro piezas breves del irlandés (Passos, Bressol, No jo, Anar i tornar) únicamente interpretadas por mujeres.
A estas tres piezas escenificadas se sumará un ciclo de conferencias que se inició el pasado miércoles y finalizará el próximo jueves con la intervención de Sanchis Sinisterra que, bajo el título En el principio estaba el fin, reflexionará sobre Eleutheria, una pieza que Beckett escribió en 1947 (fue su primer texto en francés), que no quiso publicar en vida y que no se editó en Francia hasta 1995. Por último, además de una charla con el equipo de Godot (el próximo miércoles), la Beckett propone una serie de lecturas de textos breves nacidos a la sombra de la obra y figura del autor. En formato terna, el 4 de diciembre, se oirán los de Marc Artigau, Lara Díez y Marilia Samper; el 11, los de Denise Duncan, Josep Maria Miró y Victoria Spunzberg; y el 18, los de Iván Morales, Marc Rosich y Mercè Sarrias. N.C.