Entre olvidar y recordar
Arriba, la escritora Vanessa Springora y abajo Camille Kouchner, ambas con libros centrados en abusos a menores
Antonio Lucas (Madrid, 1975) se sitúa en este nuevo libro –séptimo que publica y Premio Generación del 27– “en medio del camino de la vida”, en palabras de Dante, y desde esa atalaya de la edad hace balance de un pasado en busca del sentido de la vida y de la propia identidad. Esa mirada al pasado está teñida en gran medida de incertidumbre, como si ya no se reconociera en el que fue y tuviera que soltar el lastre del pasado para reencontrase consigo mismo.
Entre la aceptación y la renuncia, entre el olvido y el recuerdo transcurre el libro, como un itinerario introspectivo en el que el autor constata la inconsistencia de una vida, que se quería plena de certidumbres y que se termina presentando como inestable y huidiza: “Quien confía en lo inmortal muere de tiempo”, afirma rotundo el poeta.
Esa búsqueda de identidad y la reflexión sobre el sentido de la vida están presentes desde el principio del libro ya que: “Cuanto sé de mí es duda de mí mismo / así ocurre la vida”. Con un tono escéptico y desengañado, levemente barroco, se impregnan los diversos temas que aborda el libro. Así, el poeta se constituye como “la memoria de aquellos que has querido” pero sobre todo por “el miedo de perderlos”. También el amor es frágil e inestable y si aparece como auténtico, “nunca es más verdad que lo que amaste”, enseguida nos muestra su carácter fiticio: “Quien te ama te inventa, sin saber que lo hace”. También la amistad o la visión social se irán tiñendo de ese lúcido escepticismo.
“Que la vida iba en serio uno lo empieza a comprender más tarde”, dejó escrito Gil de Biedma. Y desde esa comprensión de la seriedad de la vida, el periodista y poeta Antonio Lucas realiza una labor de aquilatamiento de lo importante, que huye de la grandilocuencia, de los grandes gestos, para llegar a una cierta desnudez, porque “vivir es lo que veis, un atardecer, una insistencia” y, como señala en el último poema, que lleva como significativo título Tregua, “la vida se concreta mejor en lo pequeño”. Sabia lección de vida.
Antonio Lucas Los desnudos
VISOR LIBROS. 82 PÁGINAS. 12 EUROS