Solo por el placer de leer
Bendición y vicio se dan la mano en la devoción por la lectura, que es al tiempo don y látigo y, como tan bien dijo Truman Capote, “el látigo sólo sirve para fustigarse”, y así andamos hambrientos rebuscando tesoros escondidos, poco publicitados y a veces nada en absoluto, joyas silenciosas con las que alimentar nuestra bestia interior. Estos son algunos descubrimientos.
El grupo
Impedimenta
En el Nueva York de entreguerras, ocho mujeres acaban de licenciarse en el Vassar College; saben que no quieren ser como sus padres, pero incapaces para la ruptura, intentan mantener la cordura entre dos mundos, la libertad y el anhelo de pertenencia; partidarias del amor libre y el aborto, se rompen en su práctica; coquetean con el socialismo, con el susy trato de su clase media. Contradicciones y realidades que a partir de la boda de una de ellas enfrentarán a las jóvenes con lo que significa convertirse en adultas. Novela escandalosa en su momento (1963), hay mucho en ella de su autora, Mary McCarthy (1912-1989), graduada en Vassar y tirando a izquierdosa. Tusquets la publicó en el 2004, es el momento de recuperarla en esmerada edición de Impedimenta. Portada ganadora.
Una jaula en un jardín de verano
Alba
Pertenece a la colección Rara Avis de la editorial y sí, está donde le corresponde: una novela corta que no es lo que parece desconcierta a los que van de sabihondos. Sarah Bennett, matrícula de honor en Oxford, vuelve a casa para asistir a la boda de su hermana con un cotizado novelista. ¿Cuál de las dos es la triunfadora en un entramado de rivalidades nunca expresadas? Una implacable demolición del matrimonio (ay, estas chicas que estudian) que plantea Margaret Drabble (1939), becada en Cambridge y hermana de una historiadora y una novelista (¿cuál de las tres es la triunfadora?). Después, pueden leer Dos hermanas de David Foenkinos (Alfaguara) y comparar.
Canción
Libros del Asteroide
Todos los libros del guatemalteco de origen judío Eduardo Halfon (1971) son el mismo libro y son libros completamente distintos. Se nutren de su historia y de su memoria familiar, confundidas ambas entre sus ramas. Aquí narra el secuestro de su abuelo libanés que no era libanés, porque cuando tuvieron que huir de Beirut era Siria, pero tampoco era sirio pero hablaba en árabe y se lo llevaron los guerrilleros y la familia tuvo que pagar un pico para liberarlo pero peor fue lo del tío Salomón, que murió de niño y era el primogénito y no se cayó a un lago sino que enfermó en Nueva York... No es solo lo que cuenta, es cómo lo cuenta, y lo que deja para que nosotros nos lo contemos.
Días de invierno
Gallo Nero
La prematura muerte de Motojiro (19011932) no ha impedido que se convierta en un modelo para las generaciones de escritores japoneses que desde entonces se han sucedido. Su prosa lírica, descriptiva hasta lo indecible, capaz de captar en detalle el vuelo de un insecto, es reverenciada hasta el punto de que aún muchos estudiantes continúan dejando un limón en las librerías, emulando el cuento El limón, que forma parte de esta recopilación única.
Retratos corales, finales inesperados y autoficción
Diario del río Misisipi
Nórdica
No es una novela, es una aventura: el viaje del gran naturalista y ornitólogo a través de Estados Unidos para dibujar todas las especies de pájaros, y lo que en el periplo le ocurrió y a quién conoció. Con unas ilustraciones –y unas descripciones– con las que el alma, como el aire, escribiría Fray Luis de León, se serena. Y enestostiempos,faltanoshace.