La rockera fotógrafa y otras celebridades
⁄ Historias de grandes nombres de la música del siglo XX, de Sinatra a los Stones, Elvis, Caetano Veloso o Radiohead
⁄ Historias de tenores, sopranos y directores de orquesta; de baile y de discoteca; y la música en el relato de la humanidad
La bibliografía musical se nutre a menudo de la biografía, pero está claro que no todas tienen el mismo interés. Las mejores, sin duda, son las de aquellos artistas que nos cuentan su vida casi sin darse cuenta, mientras van escribiendo páginas que son más memoria que biografía. Ahí sobresale con maestría Patti Smith, la veterana rockera estadounidense (76 años), con unos cuantos títulos ya en su haber, libros que a menudo incluyen imágenes captadas por ella misma. Un camino que la ha llevado hasta su nuevo trabajo que, como casi toda su obra, aquí publica Lumen: El libro de los días. Un delicioso y sugerente volumen –como sus discos, como sus conciertos– con 366 fotografías, una para cada día del año –bisiesto–, acompañadas de brevísimos textos, a menudo un corto pie de foto, donde convoca sobre todo aquellos nombres y lugares que han sido su inspiración a lo largo de los años. De Rimbaud a Dylan, de John Coltrane a Robert Mapplethorpe. De Nueva York a París. Un libro que nace tras su tardía adscripción a Instagram –no tuvo móvil, confiesa, hasta el 2010– tras quedarse su vieja cámara Polaroid sin recambios.
Biografía en el sentido ya más estricto es la de Peter Guralnick Elvis (Libros del Kultrum). Dos gruesos volúmenes –Amores que matan: la destrucción del hombre y Último tren a Memphis: la construcción del mito– publicados originalmente en los años noventa y que ahora llegan en castellano traducidos por Alberto Manzano. Lo más parecido a eso que se suele llamar una biografía definitiva del mito número uno del rock, con especial atención a sus primeros años y al proceso que lo encumbró como el Rey. Para mitómanos pero no sólo.
Más vidas de músicos. También en Kultrum, Por qué importa Sinatra , de Pete Hamill, un retrato de la Voz cuyo valor principal es estar escrito por alguien que realmente conoció de primera mano a este cantante y actor tan extraordinario como, a veces, polémico. Y del crooner por antonomasia a una de las voces imprescindibles del rock más contundente, la del grupo de hard AC/DC. Brian Johnson relata en Las vidas de Brian (Editorial Contra) cómo llegó a convertirse en el cantante de la banda australiana tras la muerte de Bon Scott. Y más vidas de clásicos del rock: en Ediciones Cúpula encontraremos la de un pionero, La extraordinaria vida de Little Richard, por Mark Ribowsky; y la de un grupo legendario, La era Stone. 60 años de Rolling Stones, por
Lesley-Ann Jones.
Otra forma de biografiar la propone el veterano periodista musical Carlos
Galilea en Caetano Veloso (Blume),
retrato del genial músico brasileño a través de 19 entrevistas realizadas a lo largo de casi tres décadas, completado con otros apuntes biográficos y una completa discografía.
Tras publicar la autobiografía de
Mark Lanegan (Sing backwards and weep. Cantar hacia atrás y llorar), Contra presenta ahora el último texto memorialístico de quien fue líder de Screaming Trees, El diablo en coma, relato desnudo de un músico salvaje enfrentado a los estragos de la pandemia covídica que, a la postre, acabó con su vida.
Quienes ofrecen opciones por partida doble son Radiohead, una de las bandas clave para entender la música del cambio de siglo. Por un lado, Steven Hyden en Esto no está pasando. El ‘Kid A’ de Radiohead y el comienzo del siglo XXI (Liburuak) intenta descifrar las razones que hicieron de aquel disco de los británicos posiblemente el primer clásico del siglo XXI. Y por otra parte ¡El miedo acecha el territorio!
(Sexto Piso), donde el líder de la banda Thom Yorke y el artista Stanley Donwood compilan y amplían textos y dibujos que sirvieron de inspiración para aquel trabajo.
Y en clave ya totalmente ensayística, dos pequeñas obras, sugerentes ambas y temáticamente relacionadas: Dance usted (Anagrama) de Luis Costa y Edit (Caniche ) de Sonia Fernández Pan,
sobre el baile y la cultura de club. Y también sobre espacios que acogen la música, Este no es el libro de Sidecar (66RPM), de Roberto Tierz, recuerdos y homenaje de una de las salas más carismáticas de Barcelona en su cuadragésimo aniversario por uno de sus fundadores.
También la llamada clásica tiene quien le escriba y lea. Por ejemplo, sobre la ópera y sus máximos representantes, esos que conocemos como Divos ,yasí titula su libro Jesús Ruiz Mantilla (en
Galaxia Gutenberg), a propósito de varias generaciones de cantantes que han marcado el cambio de siglo, de los “vilipendiadosyenvidiados”TresTenoresa nombres como el de la mezzosoprano Cecilia Bartoli, “sencillamente, la mejor”. Y de las voces a las batutas: Música maestro. De Mahler a Dudamel (Fórcola), de Rafael Ortega Basagoiti y Enrique Pérez Adrián, un compendio enciclopédico de directores de orquesta desde el siglo XIX hasta hoy.
Para terminar esta selección, quizás nada mejor que un título como El ritmo infinito (Ariel), que firma Michael Spitzer. Una historia universal de la humanidad a través de la música, porque no solo la música “es esencialmente humana” sino que además “nos hace humanos. /
CULTURA/S. LA VANGUARDIA. 22 ABRIL 2023