¿Por qué no fueron anticomunistas?
En un libro entre el ensayo y las memorias, el autor denuncia el apoyo de los intelectuales de izquierdas y afines al comunismo a regímenes dictatoriales durante la guerra fría
J an E ul e
⁄ Hay repasos del autor a Alfons Comín, Manuel Sacristán, Jordi Solé Tura, Xavier Folch, Tàpies, Montalbán...
Este ensayo, con un título más incisivo y arriesgado, habría tenido un cierto impacto. Con Catòlics, comunistes i cia. Intel·lectuals catalans i Guerra Freda, le costará más. Sobre todo porque aquello que sugiere no es exactamente aquello que ofrece –los católicos son circunstanciales, por ejemplo– y no pone lo bastante el acento en aquello que argumenta. Y es que para escribirlo, Agustí Pons (Barcelona, 1947) se ha puesto el traje de André Gide y el de los críticos con Jean-Paul Sartre y, en clave catalana, señala el cinismo y el doble rasero de un grupo numeroso de intelectuales de izquierdas durante la segunda mitad del siglo pasado.
La tesis es la siguiente: estos intelectuales, afines a la ideología comunista, obviaron los crímenes cometidos en nombre de esta pretendiendo que eran fruto de una desviación de los postulados inmaculados de Lenin. Sin admitir que la violencia con que se mantenía el régimen soviético no empezaba con Stalin, sino con el propioLenin,que,segúnelautor,“convirtió una de las utopías políticas más sugestivas en uno de los regímenes políticos más terroríficos de la historia”.
A la vez, durante los años de la guerra fría, el antifranquismo, el apoyo de Estados Unidos a Franco y las guerras mantenidas por la administración norteamericana actuaban de coartada a fin de que esta intelectualidad catalana salvara sus postulados comunistas, mientras condenaban, dice Pons, “a Estados Unidos, sin ninguna excusa ideológica posible”. La cuestión aquí, pues, es: ¿por qué una mayoría de intelectuales de izquierdas no fueron anticomunistas?
El autor escribe una mezcla de ensayo y de memorias, porque se describen también episodios vividos, con la habilidad periodística aprendida sobre todo en el diario Avui –por donde desfiló la crema de los columnistas y escritores en catalán, con un nivel conjunto difícilmente encontrable en la actualidad. Y lo hace desde el bagaje previo que le permite haber biografiado a Joan Triadú, Pere Calders, Maria Aurèlia Capmany, Néstor Luján o Salvador Espriu. Y también haber explorado la figura del principal líder bolchevique en Per entendre l’Europa del segle XX i Zuric, 1917: Lenin, Joyce, Tzara (2017).
En este sentido, a Pons le habría ido bien poder añadir las impresiones y contradicciones que despertó en Catalunya la muerte de Lenin, en el año 1924. Las recogió La Vanguardia hace unos días en un reportaje que pasó sin pena ni gloria. Hoy el revolucionario no interesa a casi nadie a pesar de haber sido uno de los personajes clave del siglo XX. Lenin necesitaría que Ridley Scott hiciera una película como Napoleón para volver a ponerlo de moda. Sin retroceder tanto, el lector que recuerde los años sesenta, setenta y ochenta o aquel más joven con un cierto contexto cultural del momento se deleitará con los repasos del autor a Manuel Sacristán, Alfons Comín, Jordi Solé Tura, Xavier Folch, Antoni Tàpies, Manuel Vázquez Montalbán, Ricard Salvat y una retahíla de militantes del PSUC. Y quedará con ganas de más porque, aunque es evidente que el autor ajusta las cuentas con algunos de ellos, los pescozones no se dan desde la gratuidad, sino desde la argumentación, que es lo que requiere todo ensayo.
“En nuestro país la izquierda disfruta del beneficio de la duda. Actúa desde una superioridad moral que le permite esconder las trampas, cuando las hace”, señala Pons. Y añade que durante los años de la guerra fría las palabras que definían los grandes conceptos como libertad, igualdad, revolución o democracia quedaron desprestigiadas porque unos y otros hicieron “un uso bastardo”. Y aunque no lo dice, es seguro que del concepto de intelectual, también. Es por eso por lo que el ensayo habla de cómo se ha conformado nuestro presente. Disculpen, este libro lo tienenqueleer. /