Objetivo: saltar fronteras con urgencia
La exportación de la metalurgia catalana creció un 13,6% el pasado año y más de 300 empresas participaron en el ‘Pla Metall 2011’
El sector del metal, uno de los más arraigados en el tejido industrial catalán, no pasa por su mejor momento. La caída del consumo interno, la falta de financiación y los problemas de morosidad se han cobrado desde el año 2007 la vida de un 25,6% de las empresas, así como el 29,6% de los puestos de trabajo de un sector que, en la actualidad, sustenta más de 240.000 empleos. “Las únicas empresas del sector que aguantan el chaparrón son aquellas que exportan sus productos a otros mercados más saneados que el nuestro”, dice el director general de la Unió Patronal Metalúrgica (UPM), Ángel Hermosilla, quien advierte que la única vía de oxigenación del sector pasa por la internacionalización de sus empresas.
En esta dirección, hace más de una década, UPM, Unió Empresarial Metal·lúrgica de Terrassa (UEM), el Centre Metal·lúrgic de Sabadell y Unió Patronal Metal·lúrgica de l’hospitalet y el Baix Llobregat (UPMBALL) lanzaron de forma conjunta el Pla Metall, cuyo objetivo es apoyar a las empresas en su proceso de internacionalización. “En el 2000 nos dimos cuenta de que el futuro del sector pasaba por la internacionalización. Sin embargo, no ha sido hasta los últimos 4 años cuando realmente las empresas han empezado a tomarse en serio la cuestión”, admite Manuel Rosillo, presidente de UPMBALL.
Durante el pasado ejercicio, la exportación en el sector metalúrgico catalán creció un 13,6% respecto al 2010 y fueron más de 300 las empresas que participaron en alguna de las actividades de asesoramiento, misiones comerciales, ferias internacionales o grupos de exportación organizadas bajo el paraguas del Pla Metall. “Cada día son más las empresas que se están animando a salir, desde compañías de 15 empleados hasta las que superan los 300. Teniendo en cuenta lo mal que está el mercado en España no tienen otra tienen alternativa. Pero aún queda mucho trabajo por hacer”, explica Sofía Gabarró, presidenta del Centre Metal·lúrgic de Sabadell.
Según el secretario de la UEM y la Cecot, David Garrofé, uno de los servicios que la patronal ofrece, en el marco del Club Cecot Internacionalització, que mejor está funcionando entre sus asociados es la bolsa de profesionales en el exterior. “Uno de los principales problemas con que se enfrenta una empresa que se quiere internacionalizar es encontrar personas que estén dispuestas a expatriarse. A través de la bolsa de profesionales, las empresas pueden escoger entre más de 300 profesionales, con un currículum excelente y que cubren más de cien países, que les pueden ayudar en su proceso de interna-