“Contraté cocineros indios”
Edgar Gual, propietario de restaurante
Edgar Gual, de 33 años, había trabajado siempre como músico y técnico de sonido. “Pero vivir del mundo del espectáculo es complejo y obliga a pasar muchos días fuera de casa, por lo que no es la mejor opción cuando tienes pareja”, lamenta. Por eso, cuando conoció a su mujer y tras formarse en India, se hizo profesor de yoga y hace cuatro años abrió Vindaloo, un restaurante de comida india en Sabadell. “Hice cursos de cocina y contraté a cocineros indios, con la idea de readaptar la cocina de allí al gusto de aquí, poco acostumbrado a los sabores fuertes”, explica. Así creó “recetas para disfrutar de la comida india sin que te arda la boca”, una fórmula que funcionó e hizo que, dos años más tarde, decidiese buscar un local más grande para ampliar el negocio. Ahora Edgar ya no cocina y se dedica a atender a los clientes: los cocineros nativos se encargan del resto. “No es sencillo trabajar con personal indio, ya que su forma de entender el trabajo es muy diferente a la nuestra: ellos valoran más el trato familiar que las horas o el dinero”, explica Edgar, que reconoce que “la gente se sorprende de encontrarse un español al mando de un restaurante de estas características”.