Usuarios, transporte público y nuevas tecnologías
El 90% de los usuarios de transportes públicos de Barcelona estarían dispuestos a adoptar un sistema sin billetes físicos
Con la irrupción de las nuevas tecnologías en nuestra vida diaria se hace difícil seguir imaginando a los usuarios del transporte público de las grandes ciudades con un billete de papel en la mano. En un mundo en continua transformación digital es cada vez más necesario adaptar los medios tradiciona- les por sistemas que empleen tecnologías avanzadas que ofrezcan una mayor flexibilidad a los usuarios.
Según estudios de Accenture, en el año 2013, usar un solo billete para todos los transportes y poder adquirirlo vía teléfono móvil es el principal deseo de los usuarios consultados en nueve grandes ciudades del mundo. En el caso de Barcelona, el 90% de los usuarios estarían dispuestos a adoptar un sistema sin billetes físicos, si existiera la posibilidad de compra en canales digitales. Se trata de un dato significativo, común con los usuarios de las otras ciudades estudiadas como Seúl, São Paulo, Los Ángeles, Nueva York, Washington DC, Berlín, París o Londres.
Un buen ejemplo de ello es la Autoridad de Transporte de Washington (WMATA), que ya ha apostado por un nuevo sistema de pago electrónico de billetes. El nuevo sistema permitirá la opción de pago a través de tarjetas de crédito y débito, tarjetas de transporte sin contacto y teléfonos móviles con tecnología NFC. Los billetes de papel se irán retirando de forma gradual.
Así, WMATA, con la contribución de Accenture, será una de las primeras autoridades de transporte en Estados Unidos que em- plee esta avanzada tecnología, sustituyendo los actuales sistemas de venta de Metrorail, Metrobus, MetroAccess y aparca- mientos. Se trata, sin duda, de un paso más hacia la modernización de un servicio que debe adaptarse necesariamente a la era de lo digital.
LAS REDES SOCIALES
Los ciudadanos no sólo piden tecnologías avanzadas e integradas con sus hábitos de movilidad, sino que también quieren que los operadores de transporte sean más accesibles y se comuniquen con ellos a través de las redes sociales. Actualmente, menos del 25% de los usuarios recibe información diaria a través de dichas redes. Sin embargo, más del 90% estaría interesado en usarlas pa-
ra conocer precios y promociones, así como para recibir información sobre horarios, retrasos, estado del servicio, incidencias, etcétera.
En este sentido destaca el dato de Washington, donde casi las tres cuartas partes de los encuestados reciben información del transporte público a través de redes sociales, mientras que más del 50% sigue o tiene previsto seguir a los operadores en Facebook o Twitter.
En un entorno donde las nuevas tecnologías facilitan la vida cotidiana, los ciudadanos exigen nuevos métodos de pago y canales de interacción que resulten fáciles de usar. Ante ello, las autoridades y los operadores de transporte deben aprovechar la oportunidad y apostar por esta revolución tecnológica.