La joyería artesana entra en la óptica
Las gafas de sol de la colección Mosaico de Dolce&Gabbana son un homenaje a la tradición artesanal italiana y los traslada al universo de la óptica. Las gafas-joya son una tendencia que se ha impuesto entre las marcas de alta gama; las hay realizadas en materiales precisos como el oro o incrustaciones de piedras preciosas. En este caso, la firma italiana traslada a sus piezas más exclusivas el micromosaico, una técnica que tiene su origen en la antigua cultura romana y que con- siste en la formación de mosaicos con fragmentos de cristal prácticamente en miniatura.
El modelo estrella de la colección Mosaico, que responde a la numeración 2136, es una edición limitada con más de mil micropiezas que decoran tanto el frontal como las varillas. Los mosaicos reproducen con fidelidad distintos tipos de flor componiendo un ramo lleno de color y de reminiscencias mediterráneas. De este modelo solamente han salido a la venta 70 unidades en todo
el mundo y en boutiques seleccionadas a un precio de 4.000 euros. El resto de modelos, destinados a una comercialización más masiva, se han realizado en cuatro versiones: patilla ancha o estrecha y con una franja más o menos extensa de mosaico que va desde las 90 a las 600 micropiezas de cristal de Murano que se incrustan en las patillas de la montura. En España, estas últimas se comercializan en las tiendas de la cadena Sunglass Hut y cuestan entre 350 y 600 euros. La colección Mosaico incluye también gafas de cristal graduados y está disponible en tres tonos de montura: negro, rojo y habana.
El micromosaico que utilizan los artesanos para esta colección de gafas está realizado con cristales de Murano, uno de los más caros del mundo, y las piezas han sido colocadas a mano por los especialistas. Para realizar las composiciones florales que decoran estas gafas de Dolce&Gabbana se han utilizado más de treinta tipos distintos de hilado del vidrio que reproducen con fidelidad las hojas, pistilos y pétalos de las flores que han elegido los diseñadores italianos: pensamientos rojos, exóticos franchipanis blancos, gerberas de suaves tonos rosas y nomeolvides alilados.
Según explican desde la marca italiana, es la primera vez que se utiliza esta técnica tradicional en el sector de la óptica. Pero esta colección demuestra que el mosaico forma parte del ADN de Dolce&Gabbana y que los diseñadores aceptan cualquier desafío para incorporarlo a nuevos productos.